PALMA DE MALLORCA, 17 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Central Sindical Independiente de Funcionarios (CSI-CSIF) reclamó una mayor formación de los funcionarios de la prisión de Palma para mejorar la atención ofrecida a reclusos de otros culturas y reducir los problemas de convivencia existentes.
Así lo manifestó el representante del sindicato, Marcos Cobo, en declaraciones a Europa Press, quien señaló la necesidad de "actualizarse" al nuevo tipo de internos, procedentes de países musulmanes, para "entender mejor su cultura y el tipo de reacciones que manifiestan".
En este sentido, Cobo recordó que "en la actualidad no sólo tenemos cuatro delincuentes de poca monta como sucedía en tiempos anteriores, sino que ahora hay tipos de criminalidad muy variados".
Por otra parte, apuntó que la llegada de presos procedentes de otras culturas hace "más difícil" la convivencia entre internos, aunque "no de manera exagerada", puntualizó. En este sentido, detalló el ejemplo del servicio de cocina, que excluye el cerdo en la comida de los musulmanes, medida que es considerada como un "privilegio" por el resto de reclusos.
Cobo también lamentó la masificación de la cárcel palmesana, que cuenta con 1.008 celdas para albergar a cerca de 1.400 reclusos. Asismismo, subrayó que en los últimos seis años el número de trabajadores ha bajado de 500 hasta 450 mientras que los presos se han duplicado.
Según apuntó, la falta de personal laboral repercute de manera negativa sobre el mantenimiento de las instalaciones, puesto que la prisión sólo dispone de un electricista y carece de fontanero. Este déficit de profesionales genera "inconvenientes" cuando se registran problemas de luz o de agua en las celdas.
El sindicalista atribuyó el déficit de personal laboral a los sueldos "ínfimos" cobrados por estos profesionales. Por ello, demandó la contratación de trabajadores interinos para solventar estas "carencias".
