PALMA DE MALLORCA, 4 Jun. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Educación, Universidad e Investigación ha reconocido que el próximo curso 2020-2021 "no será un curso fácil" pero que se trabaja con la mirada puesta en la "presencialidad".
March ha comparecido este jueves en la Comisión de Educación del Parlament para abordar los efectos de la pandemia en el desarrollo del curso escolar 2019-2020 y el proceso de desescalada en la fase 3 en el sector educativo.
El conseller de Educación, tras detallar qué implica el pase a la fase 3 para el sector educativo, ha asegurado que el mes de julio será un mes "clave" para abordar el próximo curso.
March ha explicado que durante el mes de junio 14 comisiones abordarán la preparación del próximo curso y transmitirán sus conclusiones a los centros educativos para que en el mes de julio elaboren sus planes de contingencia.
La planificación, ha indicado, será fundamental para que la situación vivida, "que ha obligado a un cambio de modelo", tenga en cuenta todos los escenarios posibles, aunque la prioridad, ha insistido, es la "presencialidad" y la "normalidad", aunque ha recalcado que sin vacuna ni tratamientos "no se podrá hablar de normalidad total".
Para March, se ha reforzado la idea de la presencialidad, sobre todo cuando se habla de educación Infantil, Primaria o alumnos con necesidades especiales.
Tras la comparecencia de March, la diputada de El PI, Lina Pons, que había solicitado la comparecencia, ha anunciado una queja formal de toda la oposición ante la Mesa al considerar "una falta de lealtad institucional" que March haya presentado en la Comisión los detalles de la fase 3 que ha "comunicado en una rueda de prensa apenas una hora antes de hacerlo en el Parlament".
