La OCB exige al Ib-salud una "rectificación" de su política lingüística

Actualizado: martes, 18 marzo 2008 17:54

PALMA DE MALLORCA, 18 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Obra Cultural Balear (OCB) exigió hoy al director general del Ib-salud, Josep Pomar, una "rectificación" de su política lingüística debido al "incumplimiento generalizado" de la Ley de Normalización Lingüística, tal y como ponen de manifiesto las numerosas quejas de ciudadanos remitidas a la Oficina de Derechos Lingüísticos relacionadas con situaciones en las que el personal sanitario infringe la normativa.

Así lo dio a conocer hoy la entidad tras la reunión mantenida con Pomar, donde señaló que las quejas hacen referencia a la incapacidad de los médicos y enfermeras por hablar el catalán, así como a la contratación de personal sanitario y administrativo sin exigir ningún conocimiento de la lengua, o a la falta de uso del catalán en la rotulación interna de los centros. Otros motivos son la inexistencia del catalán en la mayor parte de páginas web de los hospitales y el uso exclusivo del castellano en la documentación interna y en la enviada a los pacientes.

Asimismo, los representantes de la OCB criticaron la situación de los derechos lingüísticos en el IB-salud, con numerosas agresiones verbales del personal sanitario a los usuarios. Para la entidad, el problema es "especialmente grave" en situaciones en las que el estado físico de los pacientes les dificulta expresarse en otra lengua que no sea la propia.

Así, la OCB exigió a Pomar que los médicos sean "respetuosos" y "traten bien a los usuarios" y consideró "inaceptable" la excusa de no entender una lengua cuando se trata de una cuestión tan delicada como la salud. Por otra parte, la entidad reprochó al director del Ib-salud la "inexistencia" de un requisito lingüístico en las convocatorias de trabajo del IB-salud.

Por su parte, Pomar reconoció el retroceso de la lengua catalana en el organismo durante los últimos años y aceptó la necesidad de incorporar la normalización como objetivo de esta legislatura. En este sentido, se comprometió a emitir una orden para que el personal sanitario respete los derechos lingüísticos de los catalanoparlantes y aceptó la necesidad de hacer una Plan de Normalización, que ha de ir precedido por una auditoría lingüística.

Entre los aspectos apuntados se encuentra la necesidad de cambiar el software del Ib-salud, ahora exclusivamente en castellano; revisar la señalización de los centros sanitarios; hacer cursos de catalán para los trabajadores y elaborar planes de acogida para los médicos provenientes de fuera del dominio lingüístico.

Finalmente, Pomar se comprometió a destinar una parte del presupuesto del Ib-salud a normalización, con el objetivo de que la situación de la lengua sea mejor de aquí a tres años. Por otra parte, respecto al requisito lingüístico en las próximas oposiciones, el director general afirmó que resulta "imposible" pedirlo a los médicos y enfermeras, pero que se incorporará para el personal administrativo.