PALMA DE MALLORCA, 26 Ago. (EUROPA PRESS) -
Las ventas de los comercios turísticos de Mallorca han descendido durante el mes de agosto entre un 25 y un 30 por ciento respecto el mismo periodo del pasado año, caída que llega en algunos casos, como en los 'souvenirs' de zonas como Calviá, Playa de Palma y Puerto de Alcudia, hasta el 50 por ciento.
Así lo afirmó hoy en declaraciones a Europa Press, el presidente de la Asociación de Comerciantes y Empresas de Servicios Turísticos de Mallorca (Acotur), José Tirado, quien apuntó que la bajada del 50 por ciento en las ventas también se produjo en otro tipo de establecimientos, como en las joyerías o las tiendas de porcelana.
Tirado indicó que los comerciantes mallorquines se encuentran en una situación de "calma tensa" puesto que, tras los meses de julio y agosto, en los que no ha habido el "repunte" de las ventas que esperaban, confían en que éste se produzca durante septiembre y octubre con la llegada de un nuevo tipo de turista.
CIERRE DE ESTABLECIMIENTOS
Los turistas de esos meses suelen ser de mayor edad y nivel adquisitivo que los que visitan la isla durante la temporada estival. Se trata de la "única esperanza" que tienen los comerciantes puesto que, en caso contrario, cerrarán "entre un 10 y 15 por ciento de establecimientos a finales de octubre", pronosticó.
En cuanto a los cierres producidos durante este mismo mes de agosto, Tirado reveló que "ha habido bajas de entre un 3 y un 5 por ciento" puesto que había establecimientos con altos índices de impago, así como que "no pueden soportar los altos alquileres que se pagan".
Sobre el porcentaje de pérdidas que los comerciantes han tenido este mes, Tirado subrayó que todavía no se puede cuantificar pero indicó que a mucha gente las ventas "no les han bastado para cubrir gastos".
Sin embargo, el presidente de la Asociación destacó que no quiere "ser alarmista aunque la gente está muy preocupada" puesto que, prácticamente, la temporada turística "ya se ha ido" y, ahora, hay que observar si se produce un "repunte" para que "no sea tan catastrófica".
Los turistas que suelen visitar la isla durante septiembre y octubre son, según Tirado, de procedencia británica, alemana y sueca.