KABUL, 12 Mar. (EP/AP) -
Un atentado suicida dirigido contra el político afgano Sibghatullah Mujaddedi, que salió ileso, se produjo hoy en Kabul dejando el balance de tres muertos, los dos suicidas y un civil, y cuatro heridos.
Según fuentes de la Policía afgana, los atacantes hicieron estallar su vehículo al paso del coche de Mujaddedi, que se dirigía a su centro de trabajo, pero no lograron cumplir su objetivo.
Por contra sí acabaron con la vida de una persona que transitaba por la zona e hirieron a cuatro civiles más, según señaló el portavoz de Policía Zalmay Huryakhil.
En la jornada de ayer, en Kandahar, dos policías afganos fueron secuestrados de sus casas en el sur de Afganistán y posteriormente decapitados y sus cuerpos abandonados en el desierto, según informó el administrador de la provincia de Helmand, Ghulam Muhiddin.
Según este responsable, no está claro si fueron los talibán o traficantes de droga --Helmand es la provincia donde más opio se produce-- los autores de los asesinatos. Ambos hombres fueron secuestrados de sus casas en las afueras de la capital provincial, Lashkargah, anoche. Sus cuerpos decapitados fueron descubiertos hoy, según Muhiddin. La Policía ha abierto una investigación.
Por otra parte, una bomba explotó también ayer al paso de una patrulla en el distrito de Nad Ali, en la misma provincia, matando a un policía e hiriendo a otros cinco, indicó el jefe de la Policía provincial, Abdul Rahman.
También en Helmand, en el distrito de Sangin, otra bomba mató a dos soldados afganos cuando alcanzó su convoy a última hora del jueves, según el general Rehmatula Raufi, un comandante del Ejército. Otros cuatro soldados resultaron heridos.
