MADRID, 8 Oct. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, ha alertado este lunes de que "la reciente escalada del conflicto en la frontera entre Siria y Turquía" y el "impacto" del conflicto sirio en Líbano son dos circunstancias "extremadamente peligrosas".
El máximo responsable de Naciones Unidas ha planteado el tema sirio durante su discurso con motivo del Foro Mundial por la Democracia celebrado en Estrasburgo (Francia) y lo ha puesto como ejemplo de que los líderes políticos "deben escuchar a sus ciudadanos antes de que sea demasiado tarde".
Ban ha admitido que, si bien las revueltas sociales de la 'primavera árabe' han supuesto esperanzas de cambio, "el éxito no está garantizado". En este sentido, ha subrayado que "lleva tiempo construir la democracia", por lo cual ha instado a "unir fuerzas" para ayudar a todos estos países.
En Siria, más de 18.000 personas --según la ONU-- han muerto desde que comenzasen las revueltas contra el régimen de Bashar al Assad en marzo de 2011. Las agencias humanitarias calculan que unos 2,5 millones de sirios necesitan ayuda urgente.
El conflicto amenaza con expandirse, ha advertido Ban, que ha descrito los últimos enfrentamientos en la frontera turco-siria y la violencia en los límites con Líbano como situaciones "extremadamente peligrosas". Ambas circunstancias, ha apuntado, demuestran que el conflicto en Siria "es una calamidad regional con ramificaciones globales".
"Llamo a todos los que tengan influencia sobre cualquiera de las partes en Siria a emplearla para promover una solución política", ha dicho Ban, cuyas declaraciones ha difundido Naciones Unidas en un comunicado. La meta es crear las "condiciones apropiadas" para sentar las bases de una "transición política" en Siria.
