Los partidarios de Muqtada al Sadr encienden de nuevo Bagdad en protesta contra un candidato chií a primer ministro

Simpatizante de Al Sadr en el Parlamento de Irak
Simpatizante de Al Sadr en el Parlamento de Irak - Ameer Al-Mohammedawi/dpa
Actualizado: sábado, 30 julio 2022 15:11

Los manifestantes vuelven a tomar el Parlamento, donde anuncian una sentada, y cercan la sede del Consejo Judicial Supremo

Al menos 125 heridos, ocho graves, por los enfrentamientos en la capital entre miles de simpatizantes del clérigo y las fuerzas de seguridad

MADRID, 30 (EUROPA PRESS)

Miles de simpatizantes del clérigo Muqtada al Sadr, hombre fuerte de Irak, han vuelto a tomar por segunda vez esta semana el Parlamento iraquí en la capital, Bagdad, durante una nueva protesta multitudinaria contra la candidatura del político chií Mohamed Shia al Sudani, proiraní contrario al religioso, como primer ministro del país, y que de momento se salda ya con 125 heridos como consecuencia de los consiguientes enfrentamientos con las fuerzas de seguridad.

La incursión en el Parlamento, confirmada por fuentes de Sky News Arabia y la agencia Rudaw, ha tenido lugar horas después del comienzo de las concentraciones en la Zona Verde de Bagdad, uno de los sectores más protegidos de la capital, que alberga a la mayor parte de las embajadas internacionales y sedes institucionales del Gobierno iraquí, entre ellas el propio Legislativo.

"Los manifestantes han pasado las barreras de hormigón de primera línea que las fuerzas de seguridad iraquíes han colocado en el puente de Al Jumhuriya, en un intento de llegar a la Zona Verde", comenzaron a indicar a primera hora de la mañana fuentes de la agencia Shafaq.

De momento, y según la agencia oficial de noticias INA, los manifestantes del interior del Parlamento han declarado una sentada de carácter indefinido mientras otro grupo está rodeando ya las sedes del Consejo Judicial Supremo así como del Tribunal Federal Supremo del país, protegidas por un destacamento de seguridad.

El primer balance del Ministerio de Salud iraquí, recogido por INA, cifra en 125 los heridos, ocho de ellos graves, por los enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad, que están lanzando gases lacrimógenos contra los concentrados. El Ministerio ha confirmado la completa puesta en marcha de los efectivos sanitarios de la capital para atender y tratar a los manifestantes iraquíes heridos.

Según las mismas fuentes, la capital ahora mismo está casi paralizada, además del de Al Jumhuriya, los puentes de Al Sanak, Al Ahrar y Al Shohada están cerrados, y el tráfico en las principales carreteras y plazas de buena parte de la ciudad "está total o parcialmente bloqueado".

Testigos de la cadena Al Arabiya y de Rudaw han confirmado que una multitud de seguidores del clérigo se están dirigiendo también a la plaza de Tahrir entre gritos contra la coalición Marco de Coordinación, un conjunto de partidos chiíes afines a Irán, grandes derrotados en las legislativas del año pasado, en las que se hizo con la victoria la alianza Sayirún.

Según informa Sky News Arabia, el Gobierno iraquí ya ha dado orden de despliegue a las unidades especiales de la Policía en varias partes del país para reforzar a las fuerzas regulares.

Por su parte, el primer ministro iraquí, Mostafá al Kazemi, en su primera reacción a las nuevas protestas, ha exigido a los manifestantes que "se adhieran al carácter pacífico de la marcha y eviten cualquier agravamiento de la violencia".

"El aumento de las protestas solo acrecienta la tensión y no sirve a los intereses públicos", ha hecho saber Al Kazemi en un comunicado recogido por la agencia oficial INA, en el que avisa que "las fuerzas de seguridad tienen el deber de proteger las instituciones oficiales" y están capacitadas para "tomar todas las medidas legales a la hora de mantener el orden".

El clérigo todavía no se ha pronunciado sobre estos incidentes, pero sí lo ha hecho uno de sus asesores, Mohamed Salé, quien ha vuelto a denunciar en nombre del religioso, como en otras tantas ocasiones, la corrupción reinante en el país.

"Las fuerzas políticas son responsables de cualquier violencia contra los manifestantes", ha hecho saber Salé, también conocido como "el ministro de Al Sadr", en su cuenta de Twitter. "Son ustedes", ha denunciado a la clase política, "quienes han robado dinero iraquí, así que dejen de violar la sangre de los inocentes".

ESTANCAMIENTO SIN FIN

Al Sudani, exministro de Trabajo y Asuntos Sociales, fue presentado como candidato a primer ministro como supuesto elegido de consenso para, según expertos consultados por 'The Arab Weekly', no enfurecer al clérigo, cuyo máximo rival, el ex primer ministro Nuri al Maliki, es precisamente la figura más destacada del Marco de Coordinación.

El grupo proiraní decidió dar un paso adelante en las maniobras para formar Gobierno, atascadas desde hace meses, después de que el mes pasado los 73 diputados de la coalición de Al Sadr, han presentaran su dimisión en bloque como miembros del Parlamento iraquí, hastiados por la incapacidad para avanzar en las negociaciones.

Cabe recordar que el sistema político está diseñado iraquí en torno a un poder compartido entre suníes, chiíes y kurdos, pero en realidad está constantemente mermado por los regateos entre facciones, la corrupción y la discordia interna, de la que tampoco se escapa el propio Marco de Coordinación, escenario de fuertes disputas internas antes de elegir finalmente a Al Sudani como candidato, de nuevo según 'The Arab Weekly'.

Hace quince días, Al Sadr, también chií y en su día vinculado a Irán, pero ahora autodeclarado como defensor del nacionalismo iraquí, propinó un golpe sobre la mesa tras convocar a cientos de miles de simpatizantes para un oración vespertina en las calles de Bagdad, donde se reivindicó como la primera fuerza política del país y exigido la reanudación de las conversaciones.

Irak ya atraviesa su periodo más largo de negociaciones de Gobierno desde las primeras elecciones celebradas en 2005 bajo los auspicios de Estados Unidos; una situación que ha llevado tanto a la población como a la clase política del país a un estado de frustración permanente e impedido al el segundo mayor productor de petróleo de la OPEP que extraiga los beneficios correspondientes del aumento de los precios del crudo.

"Vamos de crisis en crisis", lamentaba a Shafaq un alto responsable del Gobierno iraquí, "sin un final claro a la vista para acabar con este estancamiento".

Leer más acerca de: