España defiende unir seguridad y desarrollo en la táctica de la ISAF y De Hoop Scheffer dice que la OTAN no es una ONG
BRUSELAS, 24 Nov. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Jaap de Hoop Scheffer, lazó hoy en un llamamiento para que los países aliados levanten las reservas bajo las cuales enviaron soldados a Afganistán, de manera que puedan trasladarse desde su emplazamiento determinado a otros para asistir a contingentes de otros países "en situaciones de emergencia". Afirmó incluso que "el levantamiento de las reservas es más importante que llevar fuerzas nuevas" al país asiático.
De Hoop Scheffer insistirá en esta idea durante la cena con los jefes de Estado y de Gobierno de los 26 socios de la OTAN con la que abrirá el martes que viene la Cumbre de Riga, cuyo tema principal será la situación en Afganistán, donde opera una fuerza de la Alianza Atlántica, la ISAF, formada por unos 30.000 soldados, de los que unos 700 son españoles.
Una de las cuestiones relativas a Afganistán es la petición que hoy repitió De Hoop Scheffer para que los aliados levanten las reservas que mantienen sobre las labores y situación de sus tropas para que estas puedan actuar "más libremente" por todo el territorio afgano en caso de que sea necesario asistir a otros contingentes nacionales.
"En caso de emergencia cada aliado debería estar dispuesto a ayudar a los otros", en Afganistán, donde no quiso señalar territorios concretos porque, dijo, "no es una cuestión de norte y sur, sino del conjunto de Afganistán". A pesar de ello, fuentes diplomáticas apuntaron al hecho de que la ampliación de la ISAF al sur del país se hizo sin la planificación necesaria y con menos fuerzas de las que son suficientes.
El secretario general comprendió que "en algunos países los parlamentos tienen mucho que decir en el envío de fuerzas al extranjeros" que hace que no sea suficiente con que los Gobiernos estén de acuerdo.
No quiso centrar su petición hacia ningún aliado, porque, según dijo, "todo el mundo está de acuerdo, incluido España o Alemania, en que si hay que hacer frente a situaciones de urgencia todo el mundo debería poder moverse", algo que consideró "factible".
SEGURIDAD Y DESARROLLO
Afganistán es en estos momentos "la prioridad número uno", según dijo hoy De Hoop Scheffer y se ha convertido en el tema central de una Cumbre que empezará con una cena en la que los jefes de Estado y Gobierno analizarán otras cuestiones relativas, como la manera de enfocar la presencia de la OTAN en este país.
Fuentes diplomáticas señalaron que aquí el debate se centrará entre los países que como Estados Unidos o Reino Unido apuestan por fomentar el aspecto de la seguridad, con más fuerzas --con el levantamiento de reservas y contingentes nacionales-- y quienes, como España, creen que el ritmo de las operaciones "deben acompasarse a una realidad afgana que es compleja".
Así, España, Noruega o Países Bajos estiman que la reconstrucción y el desarrollo son dos elementos muy importantes que "deben acompañar" la política de seguridad, explicaron las fuentes.
Por su parte, De Hoop Scheffer aseguró este viernes que "la OTAN no es una agencia humanitaria, no nos ocupamos de desarrollo, no somos una ONG". En su opinión, el Gobierno afgano tiene responsabilidades, por ejemplo en la lucha contra la corrupción y a favor de el buen gobierno, y también la comunidad internacional, en la que se integra la Alianza Atlántica con su labor y otras organizaciones con las suyas.
Entre ellas, citó a la UE, que en estos momentos estudia la posibilidad de formar a la Policía y, tal y como defiende España, el secretario general apostó también por una mayor cooperación entre las distintas organizaciones internacionales presentes en Afganistán.
BALCANES
Junto a Afganistán, el otro punto geográfico sobre el que hablarán los jefes de Estado y de Gobierno serán los Balcanes, con distintos focos de interés como la situación de Kosovo en un momento crucial para la definición de su estatuto o las perspectivas de asociación a la OTAN que se puede ofrecer a Serbia, Bosnia-Herzegovina y Montenegro.
Por lo que respecta a Kosovo, De Hoop Scheffer aseveró que, "sea cual sea" la decisión del Consejo de Seguridad con respecto a la provincia autónoma, la fuerza de la OTAN en este territorio (KFOR) "se mantendrá", así como se prevé que ocurra con la acción de la UE.
Ésta es la misma opinión que mantiene España y fuentes diplomáticas afirmaron que de momento no hay ningún plan para disminuir la KFOR en este territorio, formada por 16.000 efectivos, de los que 760 son españoles.
La cuestión de Kosovo está también relacionada implícitamente con el "mensaje de reconocimiento" que la Cumbre enviará previsiblemente a Serbia, Bosnia-Herzegovina y Montenegro por los "progresos" realizados para ingresar en la Asociación para la Paz de la OTAN, que se establece entre la Alianza Atlántica y los países individuales para responder a sus necesidades concretas.
Países como España son favorables a este ingreso y fuentes diplomáticas estimaron que "ya deberían haber entrado", pero esta postura está enfrentada a la de particularmente Francia y Reino Unido, que mantienen una posición más vaga a la espera de la celebración de las elecciones serbias en enero de 2007 y a la actitud de Belgrado frente a una solución en Kosovo.
Por otra parte, De Hoop Scheffer afirmó que "la condicionalidad" con respecto a estos países "no ha cambiado", en referencia a su obligación a colaborar con el Tribunal Internacional para la Antigua Yugoslavia y, en particular, al aún pendiente arresto del criminal de guerra Marco Mladic por parte de Serbia. "Me gustaría ver un signo más fuerte de Belgrado hacia Mladic", dijo.
