MADRID, 29 Abr. (EUROPA PRESS) -
Estados Unidos ha condenado este martes el atentado con camión bomba ejecutado este martes en la ciudad siria de Afrin, controlada por las fuerzas turcas y los grupos rebeldes a los que respalda, que ha dejado al menos 46 muertos, al tiempo que ha pedido un alto el fuego en el país.
"Tales actos cobardes son inaceptables desde cualquier lado en este conflicto", ha indicado la portavoz del Departamento de Defensa estadounidense, Morgan Ortagus, en un comunicado en el que ha lamentado que "muchas de las víctimas eran civiles, incluidos niños".
"Estados Unidos renueva su llamamiento al apoyo y la implementación de un alto el fuego a nivel nacional en Siria, como solicitó el enviado especial de Naciones Unidas para Siria, Geir Pedersen", ha agregado.
Dentro de las 46 víctimas del atentado, cuyas identidades aún se desconocen, se encuentran once niños menores de ocho años, todos ellos residentes en Afrin o desplazados internos de diversas provincias sirias, según ha informado el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
Además, otras 50 personas han resultado heridas en el ataque, por lo que el balance de víctimas mortales podría aumentar. La mayoría de los cuerpos han quedado completamente calcinados a causa de la explosión del camión cisterna, que aparentemente estaba cargado de combustible. El Observatorio ha señalado que la mayoría de las víctimas han sido provocadas por un incendio desatado en un mercado en la zona.
