MADRID, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Salud de Francia ha constatado este jueves 23.770 nuevos contagios de COVID-19, frente a los casi 27.000 registrados durante la jornada anterior, lo que ha elevado el número de infectados en el país europeo hasta los más de 3,1 millones.
En cuanto a los fallecidos, las autoridades sanitarias francesas han dado cuenta durante la jornada de 348 muertos por la COVID-19, por lo que el cómputo global de decesos a causa de la enfermedad se ubica ya en 74.800.
Las autoridades sanitarias francesas han detallado que la tasa de positividad se mantiene en un 7,1 por ciento, mientras que el acumulado de hospitalizaciones en los últimos siete días indica que 11.219 personas han sido ingresadas en hospitales con la enfermedad en ese rango temporal, incluidas 1.800 en cuidados intensivos.
Por su parte, el ministro de Salud de Francia, Olivier Véran, ha advertido a la ciudadanía de que las mutaciones del SARS-CoV-2 se están propagando rápidamente en el país.
"Lo que queremos evitar es una epidemia dentro de una epidemia", ha señalado Véran ante la prensa, según ha informado la agencia de noticias DPA, subrayando que la presión sobre el sistema sanitario se está incrementando a medida que pacientes con las variantes ingresan en hospitales.
Según los datos que ha proporcionado, se detectan unos 2.000 casos de las nuevas mutaciones al día en Francia, siendo la británica la más frecuente.
En este contexto, el portavoz del Ejecutivo francés, Gabriel Attal, ha asegurado que 2,5 millones de franceses estarán vacunados para finales de febrero. "La campaña de vacunación continúa a un ritmo sostenido", ha dicho, antes de precisar que 1,3 millones de franceses han recibido una dosis este jueves, según ha informado el diario 'Le Figaro'.
