Un informe militar afirma que Rumsfeld estuvo "implicado" en un interrogatorio abusivo en Guantánamo

Actualizado: sábado, 15 abril 2006 14:14


NUEVA YORK, 15 Abr. (EUROPA PRESS) -

El secretario de Defensa, estadounidense, Donald Rumsfeld, autorizó o supervisó el interrogatorio de un detenido en la base estadounidense de Guantánamo, en Cuba, según se desprende de un informe elaborado por el inspector general del Ejército estadounidense en diciembre de 2005 y desvelado por la revista electrónica Salon.com.

El informe contiene un testimonio prestado bajo juramento por el teniente general Randall M. Schmidt, que afirma que Rumsfeld estuvo "personalmente implicado" en el interrogatorio del detenido Mohamad al Qahtani.

La organización de defensa de los Derechos Humanos Human Rights Watch (HRW) se hizo eco del informe y reclamó al Gobierno estadounidense que nombre un fiscal especial para investigar la responsabilidad de Rumsfeld, entre otros, en el caso de Al Qahtani.

En su opinión, es necesario un fiscal especial porque el actual Fiscal General, Alberto Gonzales, estuvo personalmente muy implicado en el diseño de las políticas de interrogatorios cuando era asesor legal de la Casa Blanca.

"La cuestión, llegados a este punto, no es si Rumsfeld debería dimitir, sino si debería ser imputado", declaró en un comunicado la responsable de Terrorismo y Antiterrorismo de HRW, Joanne Mariner.

Este nuevo informe ha sido desvelado sólo unos días después de que varios generales retirados estadounidenses, de manera personal, hayan pedido la dimisión de Rumsfeld. Primero la Casa Blanca, a través de un portavoz, y después el presidente George W. Bush personalmente han respaldado la secretario de Defensa.

Según el testimonio del general Schmidt, Rumsfeld "hablaba semanalmente" con el general Geoffrey Miller, un alto responsable en Guantánamo en 2002 y principios de 2003, sobre el interrogatorio y estuvo "personalmente implicado en el interrogatorio de esta persona". Schmidt no cree que Rumsfeld ordenara los métodos abusivos de interrogatorio usados con este prisionero, pero concluye que tenía un alto grado de conocimiento y supervisión sobre lo que estaba pasando y que sus políticas facilitaron el abuso.

Según HRW, Qahtani fue sometido a malos tratos físicos y psíquicos desde mediados de noviembre de 2002 hasta principios de enero de 2003. Durante seis semanas, afirma, se le impidió dormir, fue obligado a permanecer en posturas dolorosas, a realizar ejercicios, a permanecer en pie, se le prohibió ir al baño en varias ocasiones, entre otras humillaciones.

Para Mariner, todo ellos fueron "actos específicamente diseñados para causar dolor físico grave y dolor y sufrimiento mental grave, y eso es la definición de tortura".

INTERROGATORIO PLANEADO

Además, el Pentágono ha admitido que el interrogatorio no fue algo improvisado. "El interrogatorio de Al Qahtani fue conducido en función de un plan muy detallado, a cargo de profesionales entrenados y en un entorno controlado, con supervisión activa. Nada se dejó al azar", según dijo un portavoz del Pentágono, Jeffrey Gordon, en un email a Salon.com.

De hecho, los abogados generales del Ejército, la Armada y los Marines de Estados Unidos afirmaron en un Comité del Senado que las técnicas usadas para interrogar a Al Qatani violaban las normas del propio manual del Ejército sobre los interrogatorios para obtener información de Inteligencia. Ese trato habría sido considerado ilegal si lo hubiera sufrido un estadounidense capturado en otro país, señalaron. El informe militar en el que se habla de Rumsfeld está dirigido a investigar la responsabilidad del general Miller.

Por ello, HRW afirmó que Rumsfeld, el general Miller y todos los implicados en los interrogatorios pueden ser perseguidos en virtud de las leyes penales militares contra la tortura y los abusos sexuales.

El secretario de Defensa, aseguró la ONG, puede tener responsabilidades penales por no haber impedido abusos cometidos por sus subordinados.