El Gobierno palestino habla de "crimen atroz" y reclama una investigación internacional
MADRID, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades de Israel han anunciado este martes la muerte de tres presuntos milicianos palestinos que habrían estado detrás de varios ataques contra civiles y militares israelíes en el marco de una operación llevada a cabo en la localidad cisjordana de Nablús (norte).
"Una célula terrorista en el área de Nablús ha sido eliminada. La célula es responsable de una serie de ataques armados en el área contra las Fuerzas de Defensa de Israel y civiles israelíes durante las últimas semanas", han indicado en un comunicado conjunto el Shin Bet, el Ejército y la Policía Fronteriza.
La Policía israelí ha indicado que los sospechosos "intentaron abrir fuego" contra los agentes de una unidad antiterrorista que intentaban arrestarles, antes de agregar que durante la operación han sido incautadas dos M16, según ha recogido el diario 'The Times of Israel'.
Los palestinos muertos en la operación serían miembros de la Brigada Mártires de Al Aqsa, el brazo armado de Al Fatá, si bien el grupo no se ha pronunciado por ahora.
El ministro de Defensa de Israel, Benjamin Gantz, ha aplaudido esta "acción preventiva". "Seguiremos las operaciones proactivas, evitando (ataques) y capturando a cualquiera que intente causar daño a la gente", ha manifestado a través de su cuenta en la red social Twitter.
Por su parte, el Gobierno palestino y el Ministerio de Exteriores palestinos han condenado en sendos comunicados la operación y han reclamado una investigación internacional en torno a la operación israelí en Nablús, tal y como ha recogido la agencia palestina de noticias WAFA.
El Ejecutivo palestino ha hablado de "crimen atroz" y ha pedido a Naciones Unidas y a las organizaciones humanitarias que condenen lo sucedido, mientras que el Ministerio de Exteriores palestino ha hecho al primer ministro israelí, Naftali Bennett, "total y directamente responsable de este crimen".
Asimismo, el Ministerio ha criticado el "silencio" de la comunidad internacional ante las acciones de las autoridades israelíes y ha reclamado al Tribunal Penal Internacional (TPI) que acelere su investigación sobre los crímenes en los Territorios Palestinos Ocupados (TPO).
