AMÁN 8 May. (Reuters/EP) -
Naciones Unidas ha advertido de que una tregua de cinco días en Yemen --como proponen las partes-- no será suficiente para permitir a los trabajadores humanitarios que atiendan las crecientes necesidades de una población civil atrapada por el fuego cruzado.
La coalición internacional liderada por Arabia Saudí ha ofrecido cesar durante cinco días los ataques aéreos a cambio de que los huthis se comprometan a hacer lo mismo sobre tierra, pero de momento el acuerdo no se ha materializado.
"Soy optimista. Creo que (la tregua) llegará en un futuro cercano y tendrá consecuencias muy positivas sobre nuestra capacidad para aumentar nuestra respuesta" a la crisis humanitaria, ha dicho el coordinador de la ONU en Yemen, Paulo Lembo.
Lembo ha asegurado que la ONU "está preparada" para actuar en cuanto se haga el anuncio de alto el fuego. Ha detallado que hay un buque cisterna esperando frente a las costas de Hodaida y hay otros listas para llegar desde Yibuti con ayuda humanitaria.
"Esto barco sería el primero en llegar inmediatamente con un cargamento de combustible que se necesita mucho, pero hay más que deberían ser necesarios para aumentar nuestras operaciones humanitarias", ha indicado.
Además, ha contado que una tregua permitiría a la organización internacional desplegar un equipo de 600 trabajadores humanitarios por todo el territorio yemení para ayudar a los civiles necesitados "independientemente de su afiliación política".
Sin embargo, ha alertado de que "solo una tregua duradera supondrá una diferencia real en un conflicto en el que la dimensión humanitaria es monumental". "Una tregua de cinco días no será suficiente para cubrir las abrumadoras necesidades humanitarias en el país", ha sostenido.
Así, ha expresado el deseo de la ONU de que "esta (eventual) tregua se transforme pronto en permanente". "La situación es trágica y va de mal en peor hora por hora", ha recalcado Lembo.
En este mes y medio de conflicto --con la coalición árabe bombardeando y los huthis luchando contra las fuerzas leales al Gobierno de Abdo Rabbu Mansur Hadi sobre el terreno-- más de 1.300 personas han muerto y la escasez de comida, agua y combustible ha dejado a los yemeníes sin opciones.