MADRID, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Parlamento de Turquía ha aprobado este miércoles prorrogar un año la autorización a las operaciones militares transfronterizas en Irak y Siria, llevadas a cabo contra grupos armados kurdos como el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) y las Unidades de Protección Popular (YPG).
La propuesta, que había sido presentada por el Gobierno, permitía al Ejército llevar a cabo operaciones hasta el 30 de octubre de 2018. Asimismo, destaca que da "gran importancia" a la protección de la integridad territorial de Irak.
"Sin embrago, la existencia del PKK y Estado Islámico en Irak supone una amenaza directa a la paz regional, la estabilidad y la seguridad de nuestro país", agrega, tal y como ha recogido la agencia estatal turca de noticias, Anatolia.
El Ejército turco ha intensificado sus operaciones contra el PKK tanto en el país como en el norte de Irak --donde la formación cuenta con numerosas bases-- desde que quedó roto el alto el fuego entre el Gobierno y el grupo armado en julio de 2015.
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, anunció a mediados de julio el inicio de operaciones contra el PKK en las regiones iraquíes de Kandil y Sinyar (norte). Ankara ha llevado a cabo bombardeos frecuentes en el país vecino en los últimos meses.
La ruptura del alto el fuego tuvo lugar poco después de que Gobierno y guerrilla firmaran los conocidos como acuerdos de Dolmahbace para avanzar en las conversaciones de paz y tras la histórica entrada en el Parlamento turco del pro kurdo Partido Democrático de los Pueblos (HDP).
Más de 40.000 personas, en su mayoría kurdos, han muerto desde que el PKK se alzó en armas contra las fuerzas gubernamentales en 1984. El grupo está considerado organización terrorista por Turquía, la UE y Estados Unidos.
En el caso de las YPG, el Ejército turco inició el 20 de enero la operación 'Rama de Olivo' en el norte de Siria para expulsar de la zona fronteriza a la milicia kurda. Las autoridades de Turquía consideran a las YPG como una extensión del PKK.
