MOSCÚ, 9 Feb. (Reuters/EP) -
El Kremlin ha negado las acusaciones que responsabilizan a las fuerzas rusas de la muerte de civiles en Siria y ha alegado que no existe ninguna "prueba creíble" que avale las dudas expresadas, entre otros dirigentes, por la canciller de Alemania, Angela Merkel.
"A pesar del gran número de declaraciones, hasta ahora nadie ha presentado una sola prueba creíble que haga fiable la información", ha subrayado el portavoz de la Presidencia rusa, Dimitri Peskov, en declaraciones a los periodistas recogidas por las agencias oficiales.
Peskov se suma así a la tesis esgrimida en reiteradas ocasiones por el Ministerio de Defensa, que ha negado la muerte de civiles como consecuencia de los ataques aéreos iniciados a finales de septiembre de 2015. Rusia colabora en esta ofensiva con las fuerzas del régimen de Bashar al Assad.
Además, el portavoz del Kremlin también ha tachado de "absurda" las acusaciones del presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, sobre la supuesta "invasión" que prepararía Rusia. Peskov ha recordado que su país actúa por petición del régimen "legítimo" de Siria, en contraste con la ofensiva que lidera Estados Unidos.
