SEÚL, 22 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Corea del Sur, Lee Myung Bak, ha instado al Gobierno de China a cumplir el Derecho Internacional con los desertores norcoreanos, de modo que no sean repatriados, según ha informado este miércoles la agencia de noticias Yonhap.
"Dado que los desertores norcoreanos no son criminales, sería bueno para China que gestionara los asuntos relacionados con ellos de acuerdo a los estándares internacionales", ha dicho Lee en una rueda de prensa.
Las declaraciones de Lee se producen un día después de que el abogado surcoreano Park Sun Young, del partido opositor Hacia la Libertad, denunciara que las autoridades chinas han detenido en este mes a 34 desertores norcoreanos, que podrían ser repatriados.
En caso de ser entregados a Corea del Norte, los desertores podrían enfrentarse a duras penas, incluida la de muerte, ya que la deserción se considera un delito en este país, según han denunciado las organizaciones humanitarias con sede en Corea del Sur.
Corea del Sur ha instado a China en numerosas ocasiones a no repatriar a los norcoreanos que encuentre en su territorio. Hasta hora ha utilizado la denominada "diplomacia silenciosa", si bien, esta semana el Ministerio de Exteriores ha amenazado con elevar el tema a Naciones Unidas.
Además, Lee ha propuesto a Corea del Norte entablar unas conversaciones "a corazón abierto", aunque para ello el régimen comunista tendrá que probar su buena voluntad. El presidente ha considerado que este diálogo es necesario para garantizar la estabilidad de la península coreana.
Así, ha apuntado que Pyongyang tiene una "buena oportunidad" para mejorar las relaciones con Seúl. Aunque no ha especificado, parece ser una alusión a la llegada al poder de Kim Jong Un tras la muerte de su padre, Kim Jong Il, ocurrida el pasado 17 de diciembre.
Por otro lado, Lee ha acusado a Corea del Norte de intentar dividir a los surcoreanos de cara a las elecciones generales que celebrará Corea del Sur este año, aunque ha advertido de que sus esfuerzos serán infructuosos debido a la madurez de la población.