BRUSELAS, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Parlamento Europeo (PE) y el Consejo de la Unión Europea han logrado un acuerdo definitivo sobre las normas que obligarán a reducir la emisión de gases fluorados, responsables de los gases de efecto invernadero, que están presentes en productos como los aparatos de aire acondicionado, frigoríficos o aerosoles.
El comisario de Medio Ambiente, Stavros Dimas, se felicitó del acuerdo y recordó que si no se hubiera adoptado esta medida en 2010 este tipo de gases habrían aumentado un 50%. "No sólo no tendremos este aumento, sino que lograremos una reducción del 20% respecto a 1990", resaltó el comisario en rueda de prensa.
El Parlamento Europeo y el Consejo lograron un acuerdo después de superar el último escollo que quedaba pendiente y que tenía que ver con las excepciones nacionales para los países que tienen o quieren introducir medidas más estrictas para luchar contra el efecto invernadero, como es el caso de Dinamarca, Austria o Suecia.
La Eurocámara quería que los Estados miembros pudieran adoptar estas medidas para alcanzar los compromisos del Protocolo de Kyoto, pero el Consejo planteaba mantener como fecha límite para estas excepciones el 31 de diciembre de 2012, para no alterar el funcionamiento del mercado único.
Finalmente los eurodiputados han aceptado esta fecha con la condición de introducir una cláusula para revisarla, en función de las actuaciones futuras que deba tomar la UE a la luz de sus compromisos internacionales. Según la ponente del informe parlamentario, la eurodiputada del PPE Avril Doyle, se ha logrado un "buen equilibrio entre la protección del medio ambiente y el funcionamiento del mercado único".
ETIQUETADO CLARO
En virtud del acuerdo, los aparatos que contengan este tipo de gases sólo podrán estar en el mercado si llevan una etiqueta clara indicando de manera inequívoca el nombre químico y cantidad de este tipo de gas que, dependiendo de su composición, puede permanecer en la atmósfera durante años.
También se ha llegado a un compromiso sobre otros aspectos, como las instalaciones de aire acondicionado, refrigeración o protección contra incendios, las normas técnicas que deben respetarse y las inspecciones. Todas estas normas afectarán también a los aparatos importados. Abarca igualmente la formación del personal encargado del mantenimiento, la identificación y el inventario de las instalaciones.
