AMÁN, 21 Jul. (Reuters/EP) -
La Unión Europea flexibilizará su normativa comercial con Jordania a cambio de que las empresas jordanas den empleo a refugiados sirios, según han informado las autoridades europeas y jordanas este jueves en un comunicado.
Aquellos empresarios jordanos que empleen a un cierto número de refugiados pagarán muy pocos derechos de aduana en sus exportaciones a la Unión Europea durante los próximos 10 años, lo que supone un gran empuje para la economía jordana, que ha sufrido una recesión por la presencia de más de 650.000 sirios que huyen de la guerra en su país.
Este nuevo acuerdo forma parte de una estrategia de la Unión Europea que tiene como objetivo frenar el flujo de refugiados que entran a Europa mediante la mejora de sus condiciones en los países vecinos a Siria.
"Estoy convencido de que esta decisión fortalecerá a Jordania frente a la crisis de los refugiados", ha declarado el comisario de la UE para la Política Europea de Vecindad, Johannes Hahn.
Jordania ha comenzado a permitir a los refugiados sirios trabajar en sus compañías industriales y de exportación, donde los empresarios tienen permitido que el 25 por ciento de sus empleados sean refugiados del país vecino.
"Esto es una oportunidad de transformar la crisis de los refugiados sirios en una oportunidad económica", ha declarado el ministro de Planificación jordano, Imad Fajouri. "Podemos beneficiarnos de ellos como manos de obra extra en aquellos sectores que no afectarán a la oferta de empleo jordana.", ha añadido.
La Unión Europea también destinará unos 747 millones de euros entre 2016 y 2017 a Jordania en materia de préstamos con bonificación y ayudas económicas, ha añadido Fajouri.
Hasta la fecha, Jordania ya ha emitido unos 20.00 permisos de trabajo para los refugiados sirios en el país, y según informaciones de la ONU, se espera que esTA cifra aumente en unos 78.000 nuevos permisos para finales de año.
La Unión Europa ya tiene un acuerdo de este tipo con Turquía, a la que concede beneficios económicos y otro tipo de recompensas políticas a cambio de mantener el flujo de refugiados a raya en la frontera con Europa.
