Trib.-Una víctima de intento de secuestro en Gran Canaria dice que vive en un "sinvivir" desde el acoso de su agresor

Europa Press Islas Canarias
Actualizado: jueves, 12 junio 2008 16:43

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA 12 Jun. (EUROPA PRESS) -

Una de las jóvenes víctimas de intentos de secuestro en Gran Canaria, Yanira del Carmen Barrero, afirmó hoy que la persecución a la que ha estado sometida por parte de su presunto agresor, D.J.M.P. --cuyo juicio fue suspendido hoy por la Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Las Palmas-- la ha dejado en un "sinvivir".

La joven, de 18 años de edad y natural de Las Palmas de Gran Canaria, acudió hoy al edificio judicial de la capital grancanaria para prestar declaración en calidad de testigo, aunque el juicio fue suspendido por la Sala a petición de la letrada del acusado, Josefina Navarrete, que presentó un certificado médico que atestiguaba la enfermedad por depresión de su cliente, que no se presentó ante el tribunal.

Yanira Barrero aseguró que desde que el año pasado supuestamente D.J.M.P. intentó que subiera a su furgón blanco está "noches enteras sin poder dormir y días sin poder salir a la calle por miedo" a encontrárselo ya que el acusado está en libertad provisional, por lo que "nunca" sale sola de su domicilio.

Explicó que el día de los hechos estaba en una parada de guagua, él aparcó detrás y se bajó hablando por teléfono y le preguntó si "había visto a un chico camarero", ella le dijo que no y, acto seguido, él se interesó por su nombre, por dónde vivía, le pidió su número de teléfono, le invitó a llevarla a su vivienda y "a tomar café", pero ella "a todo le decía que no" e incluso, al ser un desconocido, le reveló un nombre que no era el suyo.

Añadió que en ese momento llegó la guagua que esperaba y cuando descendió del vehículo cerca de su vivienda le vio circulando y comprobó que la había estado siguiendo. Asimismo, apuntó que la furgoneta supuestamente propiedad de D.J.M.P. permaneció tres días estacionada delante de su casa, por lo que ella no quiso salir.

LA SIGUIÓ CON SU FURGÓN BLANCO.

Días después se lo encontraba "en todos sitios" y, en una ocasión, le preguntó a ella si conocía dónde se encontraba una calle y le contestó que no sabía y que preguntara a un policía, pero él empezó nuevamente a preguntarle su nombre y le pidió insistentemente que se subiera a su furgoneta.

Sin embargo, ella se negó y continuó caminando pero él le siguió con el coche. "Sabía a la hora que entraba y salía de casa y con quién", apuntó la joven, que resaltó que su supuesto persecutor vive cerca de la casa de su abuela.

Su madre, Benedicta Alemán, pidió "que el juez piense que si él tiene hijos a él también le puede pasar lo mismo", así como confía en que los intentos de secuestro en la isla "no sigan pasando porque es muy triste que uno no pueda estar en la calle tranquilo".

Nada más conocer la suspensión del juicio, Alemán insistió en que se moverá "cielo y tierra y salga el sol por donde salga" hasta que D.J.M.P. "pague el daño que le ha hecho" a su hija. Recalcó que su objetivo es que "a ese señor le pongan en su sitio, cueste lo que cueste", como si tiene "que ir pidiendo de puerta en puerta para que" la ayuden, apuntó.

CIENTOS DE FIRMAS PARA EVITAR MÁS DESAPARICIONES DE NIÑOS.

En el edificio judicial también se personaron las otras dos niñas de Las Palmas de Gran Canaria y Vecindario (Santa Lucía de Tirajana), respectivamente, a las que presuntamente D.J.M.P. intentó introducir en su furgón blanco y que debían prestar declaración en calidad de testigos.

La abuela de la niña de Vecindario presentó cientos de firmas de ciudadanos que piden que no haya "más desapariciones de niños" en Gran Canaria y piden, a su vez, la privación de libertad del acusado a quien describen como "el pederasta de Vecindario", que el 27 de agosto de 2007 intentó secuestrar a su nieta de 16 años de edad.

La Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Las Palmas acordó hoy suspender el juicio contra el varón acusado de dos presuntos delitos de detención ilegal, otro presunto delito de abuso sexual y una falta de lesiones, por los que la Fiscalía pide imponerle la pena de 12 años de cárcel.

El fiscal Javier García Cabañas solicitó que un médico forense revise de inmediato al acusado para "acreditar la veracidad" de su enfermedad, tal como establece la Ley de Enjuiciamiento Criminal.

Por su parte, la letrada de la defensa, Josefina Navarrete, pide la libre absolución para su cliente, que está sometido a un "enorme estrés" desde que fue detenido y aseguró que él "está convencido de que es inocente".

Los casos de intentos de secuestro de menores, que tenían en común el empleo de un furgón blanco por parte del presunto agresor, han causado gran alarma social entre la población del archipiélago, ya que los casos coincidieron con la desaparición el 10 de marzo de 2007 del niño Yeremi Vargas, de 7 años de edad y natural de Vecindario.

De hecho, la psicosis de la furgoneta blanca también se creó con el intento de secuestro de una menor en el barrio de La Garita, en el municipio grancanario de Telde, el pasado mes de enero, por el que fue detenido Marcos R.C., que permanece en prisión en el centro penitenciario de Salto del Negro, en la capital grancanaria.

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