LOGROÑO, 6 Ene. (EUROPA PRESS) -
El número 27.029 del segundo premio de la Lotería de 'El Niño' ha dejado un total de 1 millón de euros en Logroño, repartidos entre 10 décimos vendidos en la administración número 6, en la calle Muro del Carmen, en pleno centro de la capital riojana.
Según explicó Angel Alda, hijo de la titular de la administración de loterías 'Mari Carmen', el número "lo tenemos abonado desde hace muchos años, unos 15 ó 20 años, y vino ya desde otra administración que cerró por jubilación, así que lleve en Logroño desde hace 40 años".
Alda conoce el reparto de los billetes vendidos, "porque son personas abonadas desde hace mucho tiempo". En concreto, se trata de 6 personas que cuentan con el abono al 27.029 "no sólo para este sorteo, sino para todo el año, es como un premio a la fidelidad".
Entre ellos, hay jubilados, amas de casa y algún profesor -la administración está situada frente a un instituto de Secundaria-, "todos gente muy normal". Los otros cuatro décimos se vendieron en ventanilla. Por el momento, ninguno de los agraciados se había presentado por la administración.
Sí se había formado ya en la puerta del local un cierto revuelo de logroñeses, interesados por lo que estaba ocurriendo en la administración, conocida entre los logroñeses como una de las más agraciadas de la ciudad. Como ejemplo, en el año 2000, repartió 4.300 millones de pesetas, también de un segundo premio íntegro de 'El Niño'.
Los encargados de la administración, a la espera de los agraciados, brindaban "cómo no, con lo mejor que tenemos, un buen vino de Rioja", apuntó Alda, que se confesaba "alegre, porque es un momento alegre para los que nos dedicamos a la venta de loterías repartir la suerte".
Poco después, llegó a la administración la titular, María del Carmen Alda, quien reiteró que llevan muchos años abonados al 27.029 "y ya que la lotería de Navidad pasó de largo sin dejar nada, estamos encantados con que haya tocado ésta, estamos muy alegres".
"Ha caído del cielo", apostilló Carmen Alda, quien achacó la suerte de su administración al retrato de la patrona de Logroño, la Virgen de la Esperanza. "Yo pido que toque el Gordo, y, si no, el segundo premio. Pero, por encima de todo, que le toque a quien más lo necesite", finalizó.
