El Gobierno recopila en una base de datos información sobre 12.000 riojanos que emigraron a América entre 1880 y 1936

Actualizado: miércoles, 3 enero 2007 14:16

LOGROÑO, 3 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno de La Rioja ha recopilado en una base de datos información sobre 12.000 riojanos que emigraron a América, principalmente a Argentina y Chile, entre 1880 y 1936. Para consultarla se puede acceder bien a través de la página web,www.larioja.org-, o en ,www.riojanos.org, según indicó hoy el consejero de Presidencia y Acción en el Exterior, Emilio del Río.

Precisamente Del Río presentó la base de datos junto a sus autores, Mércedes Lázaro, Pedro Gurría y Rodolfo Alonso. El trabajo de investigación ha sido realizado con un doble propósito. Por un lado, se ha intentado "definir los flujos migratorios y conocer el perfil sociológico de los riojanos que en aquella época decidían viajar a ultramar a la búsqueda de un mejor futuro".

Por otra parte, se ha primado el aspecto afectivo, ya que uno de los fines es, precisamente, "rescatar del olvido a los protagonistas de esta pequeña historia y así recuperar este recuerdo para las nuevas generaciones. Un recuerdo que, de otra forma, se hubiera diluido de manera inevitable con el inexorable paso del tiempo".

El proyecto surgió de manera oficial en el año 2000, cuando fue aprobado por el Instituto de Estudios Riojanos (IER). Pero la búsqueda se había iniciado dos años antes, en 1998, cuando los doctores en Historia Pedro A. Gurría García y Mercedes Lázaro Ruiz comenzaron una búsqueda exhaustiva de emigrantes en los archivos municipales de las poblaciones de la sierra.

Con este trabajo trataban de complementar diferentes estudios demográficos sobre movimientos migratorios que finalmente publicaron en el libro 'Tener un tío en América. La emigración riojana a Ultramar (1880.1936)' (Logroño 2002). No obstante, lo que en principio surgió como un trabajo complementario adquirió pronto tal volumen que llevó a los autores a plantearse la posibilidad de elaborar esta base de datos.

Así, en 2000, ya con la colaboración de Rodolfo Alonso Ramos, licenciado en Filosofía, nació este proyecto que recientemente ha visto la luz en las páginas de Internet del Gobierno de La Rioja. En una primera fase, se creó una base de datos centrada en los 'Emigrantes de las sierras riojanas a América'.

Esa recopilación inicial, que se ha ampliado posteriormente con datos del resto de comarcas, consiguió reunir en aquel momento más de 5.000 nombres.

EMIGRACIÓN DE CARÁCTER LABORAL

Lázaro explicó que el periodo objeto de estudio se ha centrado entre 1880 y 1936 porque fue precisamente a finales del siglo XIX y, sobre todo, a principios del XX, cuando el flujo migratorio experimentó un mayor auge. Los autores señalan que el mayor aumento de los flujos migratorios se produce entre 1906 y 1913, alcanzando su máximo apogeo en 1911 y 1912.

Sin embargo, la primera Guerra Mundial trajo consigo un retroceso que, más tarde, con la crisis económica de 1929, decayó de forma definitiva.

Los autores se han centrado, por tanto, en una emigración que tenía un carácter eminentemente laboral. Por ello, 1936 es el año que pone fin a este estudio sociológico concreto, porque a raíz de la Guerra Civil española "la emigración que se produce tiene un marcado matiz político, no laboral".

La base de datos ha podido ser confeccionada a partir de un vaciado exhaustivo de los archivos locales riojanos. Los autores han examinado aquellos fondos documentales que pudieran contener información nominal de los riojanos que emigraron a las repúblicas americanas.

En particular, la búsqueda se ha centrado en censos y padrones municipales, expedientes generales de quintas y actas de consentimiento paterno otorgadas ante los jueces de paz.

Según matizó Gurría se han buscado referencias en la prensa de la época (periódicos 'La Rioja' y 'El Najerilla') e, incluso, en el Boletín Oficial de la Provincia de Logroño, en protocolos notariales y en otros archivos nacionales; en concreto, en los fondos consulares de España en Argentina y Chile conservados en el Archivo General de la Administración de Alcalá de Henares.

De forma complementaria se han utilizado referencias orales y, cada vez con mayor frecuencia, correspondencia electrónica de descendientes que han querido contribuir a mejorar la base aportando más datos de sus antecesores.

Curiosamente, la fuentes más homogéneas son aquellas relacionadas con el alistamiento militar, tales como expedientes municipales de quintas, expedientes personales de prófugos y declaraciones de las Juntas de Reclutamiento de la Diputación Provincial.

Se trata de documentos que eran expuestos en lugares públicos y se imprimían tanto en el Boletín Oficial de la Provincia de Logroño como en la prensa local.

Gracias a esta información se ha podido concluir que la mayor parte de los jóvenes se marchaba a América a edades muy tempranas, por lo que no estaba presente a la hora de tener que incorporarse a filas, por lo que eran considerados prófugos por la jurisdicción militar. Esta circunstancia carecía de connotaciones peyorativas en la época.

PERFIL DEL EMIGRANTE

Los autores de la base de datos señalaron que "resulta imposible establecer un estereotipo del emigrante riojano porque las circunstancias de la emigración a América variaron con el paso del tiempo".

En La Rioja, la emigración ultramarina "afectó principalmente a jóvenes que se encontraban en el proceso de inserción del mercado laboral".

Los autores han incluido todos los registros que obraban en su haber y que contaban con tres datos concretos como mínimo: el nombre de pila, los dos apellidos y el lugar de nacimiento. Además, en los casos de que se disponía de más información, la base incluye también el nombre de los padres, el año de salida, la ciudad de destino, el país de destino y observaciones como el estado civil, el año de defunción, la ocupación laboral o si han retornado en alguna ocasión a España.

La búsqueda puede realizarse de dos formas distintas: a través del listado general de emigrantes o mediante el listado por localidad de origen. Explicaron que aunque salieron unos 30.000 riojanos, se han podido obtener datos de 12.000.