MADRID 6 May. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de la Federación de Comercio, Hostelería y Turismo de CC.OO., Antonio Ruda, indicó hoy que el comercio madrileño ha sufrido una caída del 11,7 por ciento en las ventas comerciales a lo largo del mes de marzo con respecto al mismo mes del año anterior y pidió al Gobierno de Esperanza Aguirre que tome "buena nota" y paralice la Ley del Comercio.
Según el portavoz sindical, el dato es "muy preocupante" porque supone una caída tres puntos superior a la media nacional, que se sitúa en el 8,7 por ciento, y que supone "la mayor caída de ventas de toda España".
"Es un error pensar que se vende más por tener más horas abierto, porque los trabajadores y ciudadanos compramos lo que podemos independientemente de las horas de apertura. Somos la Comunidad donde más domingos y festivos se abre y donde más caen las ventas", apuntó Ruda.
En este sentido, señaló que "tan sólo en los tres primeros meses del año se ha perdido un 4,2 por ciento de ventas con respecto al año anterior y que faltan aún otros nueve meses para completar el ciclo. Así, explicó que los peores datos se dan en el pequeño comercio, con caídas del 11,2 por ciento; en las pequeñas cadenas, con una caída del 11,4 por ciento; y grandes superficies, con un 7,8 por ciento de caída.
Asimismo, explicó que hay que tener en cuenta que el año pasado por estas fechas se crecía un 8,1 por ciento, muy por encima de la media nacional del 5,7 por ciento. "El derrumbe del consumo está siendo aparatoso y la solución no es abrir más horas porque puede tener los efectos contrarios a los perseguidos por los ultraliberales", añadió.
Por otro lado, Ruda argumentó que mientras las ventas caen casi un 12 por ciento, el empleo ha crecido un 2 por ciento en Madrid frente a un 1,2 por ciento a nivel nacional. Este es un porcentaje similar al del año pasado, que creció un 2,1 por ciento.
"Independientemente de lo que vendas, si abres el personal tiene que estar a disposición del cliente. Por eso abrir más horas y más días puede ser un error porque la tendencia de ventas es a la baja y eso puede recortar beneficios y conducir a la quiebra o a dificultades serias al pequeño comercio y a algunas cadenas comerciales, repercutiendo en la pérdida de empleos en el sector servicios", apostilló.
Por su parte, el secretario de Política Institucional de CC.OO., Jaime Cedrún, manifestó que se han opuesto en el Consejo Económico y Social al proyecto de Ley de Modernización del Comercio porque los cambios en horarios de apertura "deben regirse por la negociación y el consenso más amplio posible y no por una imposición que pretendiendo beneficiar a unos pocos puede producir un desastre generalizado en el comercio madrileño".
Cedrúm aseguró que con este mecanismo, se producen efectos contrarios y daños irreparables en un tejido comercial "muy sensible a cambios poco meditados y puestos en marcha al calor de posiciones ideológicas que no toman en cuenta la realidad" y destacó la importancia de paralizar la aplicación del proyecto de ley y avanzar en la negociación de un pacto para la consolidación del comercio. "No hacerlo así sería irresponsable y temerario", concluyó.