Cien personas despiden a los bebés muertos el viernes en un entierro pagado por familiares, al carecer de medios los padres

Actualizado: domingo, 7 diciembre 2008 16:19

Durante la ceremonia, Francisco, el padre de los niños, estuvo a punto de desmayarse, mientras que la abuela estaba "destrozada" de dolor

MADRID, 7 Dic. (EUROPA PRESS) -

Un centenar de personas despidieron este mediodía a los dos bebés fallecidos el viernes en el incendio de la chabola en la que vivían en un emotivo entierro celebrado hoy en Carabanchel, y que ha tenido que ser sufragado por familiares, al carecer los padres de recursos económicos para hacer frente al gasto.

Según informaron a Europa Press fuentes del cementerio Sacramental de Santa María, situado en Carabanchel, familiares de los niños procedentes de Valencia se han hecho cargo del acto fúnebre. Por su parte, la funeraria Nuestra Señora de los Reyes puso también de su parte y ajustó en lo posible el precio para hacerlo más asequible.

Los parientes de los bebés fallecidos decidieron enterrarles en el Sacramental de Santa María porque su abuela tenía sepultura allí. La ceremonia fúnebre tuvo lugar minutos antes de las 12.00 horas, tras llegar las pequeñas urnas de los bebés en un coche procedentes del Instituto Anatómico Forense, donde les practicaron la autopsia.

El entierro, que duró sólo unos pocos minutos, fue oficiado por un pastor evangélico y trascurrió en medio de muestras de dolor y sufrimiento pro parte de los allegados. "Había mucha gente mayor llorando amargamente, mientras que la abuela estaba destrozada, al igual que el padre, que estuvo a punto de desmayarse", indicaron a las mismas fuentes.

El incendio que acabó con la vida de los dos bebés se produjo minutos antes de las 13.00 horas del viernes. Las llamas prendieron rápidamente la estructura de madera y ladrillo donde se encontraban los hermanos, de 3 y 5 años, y la abuela de los pequeños, de unos 70 años, que no pudo hacer nada por salvarlos, lo que le provocó una fuerte crisis nerviosa.

Los sanitarios y psicólogos atendieron a la abuela de los menores. Los bomberos extinguieron rápidamente el fuego provocado en la chabola por un cortocircuito, al parecer provocado por la explosión de un aparato eléctrico en el interior del chamizo.