Los colegiales de la UCM implicados en los altercados no pueden ser sancionados, según Mikel Buesa

Actualizado: martes, 30 marzo 2010 14:57

MADRID, 30 Mar. (EUROPA PRESS) -

Los colegiales implicados en los altercados de la semana pasada con el rector de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), Carlos Berzosa, no pueden ser sancionados porque el Reglamento disciplinario que se utiliza para las sanciones no tiene rango de ley, y la Constitución exige que todas las sanciones de tipo administrativo y penal se tienen que establecer por ley.

Así lo explicó a Europa Press el representante de los profesores titulares y catedráticos en el Consejo de Gobierno de la Universidad Complutense, Mikel Buesa, quien señaló que el Reglamento que se está utilizando para las sanciones se aprobó en 1954, en la época del General Franco, por decreto y que a día de hoy no tiene una "ley habilitadora".

"Lo que dice la Constitución es que todas las sanciones de tipo administrativo y penal se tienen que establecer por ley, y el Reglamento disciplinario de Universidades, al no tener una ley que habilite las sanciones, no cumple el requisito constitucional", indicó Buesa, al tiempo que señaló que esta es la respuesta que han venido dando los tribunales en virtud de este Reglamento.

Tal y como adelantó a El Mundo, Buesa explicó que él tiene constancia de este punto porque cuando era, en los años 80, vicedecano de Bibliotecas --Berzosa era por entonces decano--, se encontraron con el caso de una alumna que robó un libro en la biblioteca, que fue expedientada, y que al recurrir, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) le dio la razón y "dijo que no se podía sancionar con este reglamento porque era inconstitucional".

A pesar de esto, apuntó, ningún ministro de Educación, desde entonces, ha entrado en este asunto, y por tanto, las universidades están sin un reglamento de disciplina académica adaptado. Y es que la renovación tiene que ser establecida por una ley del estado y tiene que ser el Ministerio el que tome la iniciativa mediante un anteproyecto, puesto que las universidades no pueden reglamentar.

"Cuando se piensa que un reglamento sancionador es una represión intolerable, no se hace nada para cambiarlo y estas cosas, como suelen ser incidentes que no han afectado a los profesores o las autoridades académicas, sino a personas externas, pues no se ha hecho nada al respecto", consideró Buesa, en relación a los últimos altercados con políticos en universidades como con la diputada de UPyD, Rosa Díez.

No obstante, explicó que se siguen abriendo expedientes a los estudiantes, que cuando no recurren, se quedan con la sanción. Sin embargo, en este punto, Buesa concreto: "En realidad, quienes apliquen este reglamento sabiendo que no cumplen la Constitución, están rozando la prevaricación".

A su juicio, lo razonable sería, como le ha planteado ya al rector en el Consejo, que la Universidad se dirigiera al Ministerio de Educación o al Consejo de Universidades (para que este a su vez se dirigiese al Ministerio), para promover "esta ley disciplinaria que es necesaria pero no se ha hecho nada al respecto".

Fuentes de la Universidad Complutense de Madrid explicaron a Europa Press que el centro, de momento, lo que ha hecho ha sido abrir expedientes informativos para analizar la situación. No obstante, el propio rector ha dicho por activa y por pasiva estos días que aboga por el diálogo.

Por lo tanto, todo lo dicho sobre expulsiones y sanciones se podría quedar en ruido, y en un aviso a navegantes: los reivindicaciones de los estudiantes se pueden tratar mediante la conversación, y con los propios órganos que posee la Universidad para ello.