Defensor del Pueblo investiga una plaga de parásitos en el Grupo de Menores de la Policía

Actualizado: miércoles, 5 marzo 2014 15:18

MADRID, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Defensor del Pueblo ha abierto de oficio un expediente sobre la existencia de una plaga de parásitos en los calabozos del Grupo de Menores de la Jefatura Superior de la Policía de Madrid (Grume), situadas en las dependencias de la calle Julián Camarillo, según consta en el informe anual de la institución.

Concretamente, según denunció hace unos meses el sindicato SUP, se trata de una plaga de chiches, garrapatas y pulgas que han picado a los menores y a algunos agentes encargados de custodiarles.

Ya en el verano de 2012 estos calabozos fueron clausurados y desinfectados, pero la situación se repitió en la primavera del año pasado. Observaron que las picaduras se daban con mayor frecuencia en los calabozos 5 y 6, con varios afectados durante todo el año pasado.

TRATO INCORRECTO POLICIAL

Por otro lado, el informe del Defensor del Pueblo también recoge una queja formulada por un ciudadano que manifestó que al regresar a su domicilio del centro de Madrid dos agentes de la Policía Nacional le impidieron transitar por una calle, viéndose obligado a tomar un camino alternativo, durante el cual tuvo que soportar en varias ocasiones gritos y empujones por parte de los agentes de la Policía Nacional.

"Además del maltrato verbal y físico al que había sido sometido, ya en la Comisaría de la calle Leganitos, fue objeto de burlas por parte de los agentes que custodiaban la puerta de la comisaría, siendo disuadido e intimidado en su intención de formular una denuncia y una queja", señala.

Por eso, la institución ha formulado a la Dirección General de la Policía un recordatorio dirigido a los funcionarios de la comisaría de Centro de Madrid, del Cuerpo Nacional de Policía, del deber de observar en todo momento "un trato correcto y esmerado en sus relaciones con los ciudadanos, y de impedir, en el ejercicio de su actuación profesional, cualquier práctica abusiva, arbitraria o discriminatoria que entrañe violencia física o moral".

PÉRDIDA DE PERTENENCIAS DE DETENIDOS

Por otro lado, el Defensor del Pueblo ha recibido una queja de un detenido que fue conducido a los calabozos de la comisaría del centro de Madrid y posteriormente trasladado al Registro Central de Detenidos y, puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 5, al que extraviaron sus pertenencias personales, que fueron recuperadas a los 18 días en los calabozos de la Plaza de Castilla.

El organismo que dirige Soledad Becerril recuerda que la Instrucción 12/2009 de la Secretaría de Estado de Seguridad que regula el 'Libro de Registro y Custodia de Detenidos' dispone que las pertenencias retiradas a los detenidos se introducirán en bolsas de plástico o similar que se cerrarán con precinto, con el sello de la dependencia y firma del detenido, y que se anotará una relación sucinta de todos los efectos.

De la información que proporcionó la Dirección General de la Policía se desprendía que se había producido una falta de diligencia en la adecuada llevanza y custodia del Libro de Registro y Custodia de Detenidos.

"A pesar de la desaparición temporal de una parte de las pertenencias del detenido, en concreto el dinero en metálico, no se había realizado una adecuada investigación y comprobación de su reclamación", ha indicado.

La institución recordó a la Dirección General de la Policía que debe extremarse la vigilancia respecto de la correcta llevanza y cumplimentación del mencionado libro en todas las dependencias policiales, y deben investigarse las posibles disfunciones tan pronto como exista alguna queja de un detenido respecto de la devolución de sus pertenencias.

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