VALLADOLID 28 Nov. (EUROPA PRESS) -
Los secretarios generales de CC.OO y UGT en Castilla y León, Ángel Hernández y Agustín Prieto, respectivamente, coincidieron hoy al recordar a la empresa Renault que tiene un compromiso con la Administración y con los propios sindicatos para adjudicar un nuevo modelo a la factoría de Carrocerías-Montaje de Valladolid, un anuncio que, según lamentaron, aún no se ha producido y "es el que da continuidad a las fábricas".
Así de tajante se pronunció Ángel Hernández a preguntas de los periodistas sobre los nuevos planes de la empresa francesa de la marca del rombo que ha anunciado un nuevo expediente de regulación de empleo de carácter suspensivo para el año 2009 y para todas sus factorías en España.
Tras destacar la "plena coincidencia" entre UGT y CC.OO. sobre este tema, Hernández aprovechó la ocasión para aclarar que en este asunto se mezclan tres tipos de situaciones, las coyunturales, las estructurales y otras "futuristas" relacionadas con un posible vehículo eléctrico, proyecto que tendrán que estudiar conjuntamente los gobiernos central y regional "porque no hay que descartar nada", consideró.
Respecto a la situación coyuntural, Hernández reconoció la bajada del mercado del automóvil tanto en España, en particular, como en Europa, en general, por lo que consideró que el ERE anunciado ayer por Renault a la representación legal de los trabajadores tendrá que ser evaluado por dicho órgano de representación de los empleados "que tendrá que valorar si la medida se ajusta o no a la caída del mercado".
En cuanto al aspecto estructural, el dirigente regional de CC.OO. reiteró una vez más el compromiso asumido por la multinacional francesa con sindicatos y administraciones españolas para adjudicar ese nuevo modelo a la fábrica de Valladolid, "y eso es lo que da continuidad estructural a la factoría, independientemente de las cuestiones coyunturales del mercado", insistió.
Dicho esto, Hernández aprovechó la ocasión para recordar que los sindicatos mayoritarios de clase de Castilla y León han convocado una manifestación para el próximo 13 de diciembre por las calles de Valladolid para exigir una solución al futuro del sector de la automoción, una movilización que, según aclaró, no va contra nadie "si no simplemente para denunciar una situación y recordar a Renault que tiene un compromiso con Valladolid, con Castilla y León y con el Gobierno de Castilla y León".
"Sus efectos se verán en el tiempo pero es evidente que si no hacemos nada los efectos seguramente nos los impondrán otros", advirtió Hernández, que recordó que la manifestación del día 13 irá precedida de la presentación el 4 de diciembre en la sede del CES de un manifiesto dirigido a la sociedad civil, a las formaciones políticas, a los ayuntamientos y a las diputaciones en el que UGT y CC.OO. solicitarán su apoyo al texto conjunto y a la convocatoria de la manifestación.
En este sentido, el vicepresidente segundo de la Junta y consejero de Economía y Empleo, Tomás Villanueva, reconoció que, a día de hoy, el Gobierno de Castilla y León no ha decidido se acudirá o no a la manifestación del 13 de diciembre, si bien recordó que las instituciones públicas no se suelen manifestar. Dicho esto, garantizó el "trabajo inequívoco" de la Junta para garantizar el futuro del sector de la automoción en Castilla y León.
Los dirigentes sindicales y el consejero de Economía realizaron estas declaraciones tras la constitución oficial hoy del Consejo del Diálogo Social de Castilla y León, un encuentro que estuvo presidido por el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, y que se prolongó durante casi cuatro horas en las que Gobierno y agentes económicos y sociales evaluaron el devenir de la crisis económica y sus efectos en algunos sectores, como el de la automoción "del que dependen muchísimos miles de trabajadores, una buena parte del Producto Interior Bruto de esta Comunidad y, sin duda alguna, la mayor fuerte de ingresos por exportaciones", destacó Hernández.
Por su parte, el secretario regional de UGT aprovechó la ocasión para manifestar la preocupación de los agentes sociales por el futuro de todo el sector de la automoción en Castilla y León, no sólo Renault, ya que, según recordó, la industria del motor mueve en torno a 40.000 ó 45.000 empleados en la Región, con provincias donde un tercio de la mano de obra industrial pertenece a ese sector.
"Nos preocupa en toda la Comunidad. Nos preocupa lo que pueda ocurrir en las empresas matrices, en función de la carga de trabajo que tengan, y nos preocupan todas las empresas que están alrededor", concluyó Prieto que cifró en más de 5.000 las personas afectadas hasta la fecha por los expedientes de regulación presentados en el sector en Castilla y León, "con lo cual el problema es, desde luego, de mucha envergadura".