PARIS, 17 Dic. (EUROPA PRESS) -
La fábrica de Renault en Cléon, Alta Normandía, podría hacerse en marzo con la fabricación del nuevo motor diésel de la marca del rombo, desbancando así a Valladolid o a Pitesi, en Rumanía, los otros dos lugares que se postulaban para el programa, según informa hoy el diario económico galo 'Les Echos'.
El constructor todavía no ha tomado un decisión sobre las tres factorías en liza pero la balanza parece inclinarse claramente hacia la fábrica francesa, sobre todo tras la reunión mantenida el pasado lunes 15 de diciembre en el Elíseo con el presidente Nicolas Sarkozy, que prometió más ayudas al sector del automóvil siempre y cuando se mantenga la producción en territorio galo.
Así, según el diario, la factoría de motores de Cléon, que emplea a 4.600 trabajadores, está mejor situada que la española o la rumana, aunque cuente con menos subvenciones públicas. "El futuro de Cléon se juega con la producción de este motor", aseguran los responsables políticos de la zona.
Actualmente en fase de revisión de todas sus inversiones, la dirección de Renault firmó no obstante como tenía previsto a finales de noviembre un preacuerdo industrial sobre el programa bautizado 'R9 M', que consiste en un futuro motor diésel de 1.6 litros.
DECISION EN MARZO.
La confirmación de la factoría y de la inversión final está prevista para el próximo mes de marzo de 2009, pero el proyecto R9 M está ya atribuido a Cléon en la primera planificación trianual de producción, según fuentes próximas a la empresa citadas por 'Les Echos'.
Este motor cumple las nuevas normas europeas sobre emisiones contaminantes y se instalaría primero en los coches pequeños y luego en los de alta gama. De ahí que la producción anual empezaría siendo de 300.000 unidades para pasar luego a ser de entre 450.000 a 600.000 al año.
El director de ingeniería mecánica de Renault, Jacques Prost, decía recientemente que podría equipar algunos modelos de Nissan. En cualquier caso, se trataría de un gran programa para la fábrica de Cléon, que produjo 740.000 motores de cuatro tipos el año pasado, sobre todo teniendo en cuenta que un motor no dura los seis o siete años que lo hace un coche sino tres veces más.
El nuevo programa no generará sin embargo nuevas contrataciones porque la planta tiene ya efectivos de sobra pero al menos mantendrá el empleo actual. Cléon representa el 30 % de las actividades mecánicas de Renault y trabaja en un 25% para otras marcas como Dacia, Samsung, Nissan, Suzuki y Opel.
Finalmente, las subvenciones que podrían ir a parar a las entidades locales francesas para el R9 M serían de entre 11 a 18 millones de euros, frente a los cerca de 23 millones para Valladolid y 28 millones para Pitesti, según los responsables locales.
Otros dos factores juegan favor de la fábrica normanda: su proximidad geográfica a las de Flins, Douai y Sandouville y sus competencias humanas y técnicas, que minimizan la inversión, agrega el diario.
