MURCIA 23 May. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha desarrollado en la comarca del Guadalentín la operación 'Irrigat', en la que, hasta el momento, se han desarticulado cuatro grupos delictivos, asentados en Lorca, Puerto Lumbreras, Águilas, Cartagena y en la provincia de Alicante, dedicados a la sustracción de maquinaria y herramienta agrícola en fincas y cooperativas.
En la operación, que aún continúa abierta y que está enmarcada en el 'Plan contra las sustracciones en explotaciones agrícolas y ganaderas', la Guardia Civil ha detenido a los 18 integrantes de los cuatro grupos delictivos, algunos de ellos con vínculos entre sí, y ha esclarecido más de una decena de delitos contra el patrimonio y ha recuperado tractores, maquinaria, herramienta y combustible sustraídos.
Efectivos del Equipo ROCA de la Benemérita abrieron la operación el pasado año, cuando detectaron un notable incremento de delitos contra el patrimonio en explotaciones y cooperativas agrícolas de prácticamente toda la comarca del Guadalentín, según informaron fuentes de la Benemérita en un comunicado.
Los primeros pasos de la operación permitieron a los guardias civiles contabilizar más de una decena de delitos de robo con fuerza y hurto cometidos contra cabezales de riego, almacenes y fincas de los municipios de Alhama de Murcia, Totana, Águilas, Lorca y Puerto Lumbreras, unos hechos que habían generado cierta alarma social en el sector agrícola.
Los indicios recabados de las inspecciones técnico-oculares y otras pesquisas practicadas permitieron constatar que tras las sustracciones se encontraban diferentes grupos delictivos que actuaban sobre distintas instalaciones agrícolas con un mismo objetivo: la sustracción de maquinaria y herramienta agrícola, pero con diferencias en sus perfiles criminales y 'modus operandi'.
COLABORACIÓN CON LAS POLICÍAS LOCALES
La Guardia Civil desarrolló entonces la operación en dos fases. Por un lado, en colaboración con las policías locales de Lorca y Puerto Lumbreras, dispuso unos dispositivos de vigilancia sobre las zonas más susceptibles de sufrir esta tipología delictiva, con la finalidad de frustrar la comisión de más hechos delictivos.
Por otro, se continuó con la labor investigadora para identificar a los autores de los hechos, en la que se ha contado con la colaboración del Equipo ROCA de la Guardia Civil de Utrera (Sevilla).
Fruto de la investigación, los agentes obtuvieron indicios sobre la autoría de los hechos investigados. Las pesquisas practicadas constataron que tras los robos y hurtos se encontraban cuatro grupos delictivos, algunos de ellos con vínculos entre sí.
Uno de los grupos estaba asentado en algunas pedanías del municipio lorquino; otro, vinculado a la sustracción de tractores, tenía su residencia en Águilas y Puerto Lumbreras; el tercero de ellos era de Cartagena y el cuarto lo componía un clan familiar de la provincia de Alicante, estos dos últimos con lazos familiares.
Una vez obtenidos todos los indicios necesarios e identificados todos los integrantes de los grupos delictivos, los guardias civiles establecieron un dispositivo de búsqueda sobre los sospechosos, que ha culminado con su localización y detención como presuntos autores de los delitos de robo con fuerza y hurto.
Durante el desarrollo de la operación se ha recuperado gran cantidad de efectos sustraídos, que ya han sido devueltos a sus propietarios, como dos vehículos agrícolas (tractores) --uno de ellos localizado en el municipio sevillano de Lebrija y otro escondido dentro de un camión ubicado en una campa de Lorca, cuando se disponía a su traslado hacia la Comunidad Valenciana--, herramientas destinadas al uso agrícola y 1.000 litros de gasóleo B.
Del análisis de la información obtenida durante la operación, que aún continúa abierta, los guardias civiles han esclarecido hasta el momento más de una decena de delitos contra el patrimonio, no descartando que esta cifra pueda aumentar y que se practiquen nuevas detenciones.