Barberá pide que "convirtamos estas actuaciones, estos ataques, en votos para el PP"
VALENCIA, 24 May. (EUROPA PRESS) -
El vicesecretario general del Partido Popular de la Comunitat Valenciana, Ricardo Costa, y la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, lamentaron hoy la "nula preocupación" del delegado del Gobierno, Antonio Bernabé, ante los tres ataques sufridos en sedes populares de la capital desde abril.
Costa, en declaraciones realizadas ante la sede del PP en el barrio de Russafa, en Valencia, que sufrió el ataque esta madrugada, manifestó "con pesar" que el delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana no se ha puesto en contacto con el partido ni con responsables institucionales, ni lo hizo cuando explotó el pasado día 12 otro artefacto ante la sede regional de los populares, ni para informar ni para aconsejar sobre posibles medidas a adoptar.
Según el dirigente popular, la información hubiera sido "una muestra de sensibilidad política por parte del delegado del Gobierno, pero también una muestra de sensatez", porque Bernabé "es el responsable de la seguridad de todos los valencianos".
Asimismo, lamentó la "ausencia" y "nula preocupación" del delegado del Gobierno ante los ataques y apuntó que "la nula preocupación por los problemas del PP es la misma que muestra por los principales problemas de los ciudadanos: nada, ninguna", aseguró.
El dirigente popular explicó que según el reporte policial, el artefacto era "de similares características al que explotó el día 12 en la sede regional del partido", al parecer de "fabricación casera con líquido inflamable" y dotado con dispositivo retardante, que produjo desperfectos en la fachada del inmueble, en una furgoneta que estaba aparcada en la puerta y en el interior de la sede.
Según explicó, la deflagración produjo la rotura del cristal y se prendieron las cortinas interiores, aunque el fuego no se extendió a otras partes de la sede y no se registraron daños personales, porque el incidente se produjo de madrugada.
La sede atacada alberga material de campaña electoral, como las papeletas electorales autonómicas y municipales, por lo que es un local "claramente importante en estos momentos en nuestra labor de distribución".
Costa expresó la "más absoluta repulsa a este tipo de actos que suponen un ataque muy claro contra la ciudadanía en general, contra los principios democráticos y de libertad de expresión que los partidos políticos defendemos, mantenemos y luchamos por ellos" y remarcó con "mayor énfasis" su condena a los hechos por estar inmersos en la campaña electoral.
Insistió en que los hechos son "un ataque contra los cien mil militantes del PP y contra los cinco millones de ciudadanos de la Comunitat Valenciana y contra todas las personas que durante estas fechas estamos defendiendo los principios democráticos y constitucionales, y contra los ciudadanos que están ejerciendo en estas fechas libremente su decisión sobre qué opción política tomar".
Además, la explosión, a su juicio, "no es sólo un ataque a la sede del PP, es un ataque a nuestros principios más sagrados", como, citó, "la solidaridad, la libertad de expresión y de defensa del estatuto y las instituciones".
El dirigente popular mostró también un "sentimiento claro de indignación" por los "reiterativos ataques" a las sedes del PP y en este sentido, recordó que ya se han registrado tres recientemente: uno con pinturas y dos con artefactos incendiarios.
VIOLENCIA EXTREMA
Por su parte, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, que se trasladó a la sede de Russafa nada más conocer los hechos, criticó que se trata de la tercera agresión que han sufrido los populares esta campaña en sus locales y lamentó la "violencia extrema" contra el PP.
También exigió al delegado del Gobierno que "deje de estar encerrado en su despacho para que nos cuente ya los resultados de la investigación" tanto de las pintadas como la del anterior artefacto y le instó a que "inmediatamente se ponga en marcha para investigar quienes han sido los autores y que caiga sobre ellos el peso de la ley y del estado de derecho".
PATRAIX
Barberá, que pidió "conertir" estos ataques "en votos para el PP", reclamó a Bernabé que "deje de estar escondido y que saque resultados de la investigación" de estas acciones y también de la explosión sucedida en la subestación de Patraix, sobre la que no han dicho, criticó, "ni una sola palabra" sobre las causas del incidente "que hay que conocer para poder exigir responsabilidades".
Preguntada sobre la autoría, indicó que "lo que sé es que el PP ha sufrido tres agresiones, si está orquestado o no que lo diga quien lo tiene que decir, que es quien tiene que investigar; lo que quiero es que no esté tanto rato callado, que salga ya del despacho a informar".
Barberá calificó de "lamentable" lo ocurrido e instó a producir un "rechazo de la sociedad a este tipo de agresiones, que es la manera en la que los violentos, algunos, que no sabemos quienes son, manifiestan su manera de participar en la campaña electoral". No obstante, advirtió de que "así no se puede participar; esto no es democracia y por tanto, tienen que estar fuera de las reglas del juego democrático que son las elecciones".
La alcaldesa expresó su "respaldo, ayuda y apoyo no solamente a todos los militantes que vienen aquí, a su sede de Russafa a trabajar, a compartir y debatir, sino también a todos los vecinos que se han visto afectados y que se han asustado, como es natural", porque, argumentó, "una explosión a las 4.30 de la mañana con el incendio de un coche es para asustar a cualquier vecino". Así, les pidió disculpas en nombre del PP.
Barberá remarcó que "hay que respetar la ley, la palabra, que es la herramienta de la democracia, y no las bombitas, que es la herramienta de los violentos".
La alcaldesa dijo que "vamos a continuar la campaña, que es lo que nos mandan los ciudadanos, que es donde tenemos que ganar, con votos y no con bombitas". En este sentido, señaló que "frente a tres agresiones, dos de ellas con explosivos, más votos para el PP, os lo pido, convirtamos estas actuaciones, estos ataques, en votos para el PP".
El primer ataque se registró el pasado día 25 de abril, cuando aparecieron pintadas con "símbolos radicales" en la fachada de la sede regional de la calle Quart; el segundo,el pasado día 12 de mayo, cuando un artefacto hizo explosión en misma sede regional que causó diversos daños materiales en la fachada lateral del edificio y el último, esta madrugada.
