SEVILLA, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente del PP-A, Javier Arenas, anunció que, si sale elegido como presidente de la Junta de Andalucía en las próximas elecciones autonómica, enviará una ley al Parlamento nacional que garantice la igualdad en los derechos y deberes de todos los ciudadanos, "de la que ahora se carece", y para que no se discrimine por razones idiomáticas, entre otras.
En un acto público en el que recibió el apoyo del presidente del Gobierno valenciano y del PPCV, Francisco Camps, Arenas indicó que muchos ciudadanos que se incorporan a una Administración o buscan empleo en regiones como Cataluña o País Vasco son "rechazados" por no saber uno de los idiomas de aquellas zonas.
Los ciudadanos "son rechazados por estar orgullosos de ser andaluces y de hablar castellano", agregó, una situación que "no debe tener cabida" en el territorio español.
Por otra parte, insistió en que las decisiones de un gobierno "no pueden estar condicionadas por las minorías nacionalistas radicales". En este sentido, matizó que "no se puede permitir que las Administraciones de Cataluña y País Vasco tengan más influencia en el Gobierno central que Andalucía".
GOBIERNO DEL GANADOR.
Arenas pidió hoy al presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, que se comprometa a que "si el PP gana las elecciones, liderará el cambio en los próximos cuatro años".
El dirigente popular aclaró que ese "cambio" pasa por "enterrar rencores y divisiones en Andalucía en función del pasado, que desaparezcan los insultos de la vida política y se centren las acciones en las necesidades reales de los ciudadanos".
FINANCIACIÓN SOLIDARIA Y REFORMAS "PROFUNDAS".
Por otro lado, señaló la necesidad de contar con un sistema de financiación autonómica solidario e igual para todas las comunidades y cuyo criterio fundamental debe ser el de población.
Además, abogó por reducir el gasto corriente en la Administración, disminuir a la mitad los altos cargos y la burocracia, y bajar el impuesto de la vivienda y el de sucesiones y donaciones.
También, apuntó a la realización de reformas económicas, judiciales y educativas "profundas", además de abordar cambios en el área sanitaria, aumentando el número de médicos y enfermeras y reduciendo "el colapso de atención" y reduciendo el tiempo de espera.
Por último, señaló que, si fuera presidente de la Junta, realizará un nuevo plan de ordenación urbanística, dejando a un lado el Plan de Ordenación Territorial de Andalucía (POTA), consensuado con todos los ayuntamiento y respondiendo a las "verdaderas necesidades" que se plantean en los municipios.
