(Ampl) Rajoy dice que Zapatero ha dejado al descubierto el "careto", y ofrece "moderación" frente a la "tensión"

SANTANDER, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Partido Popular y candidato a la Presidencia del Gobierno, Mariano Rajoy, aseguró hoy que el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, "se ha quitado la careta y ha aparecido el careto". "Quiere tensión y dramatismo. Yo no quiero tensión ni dramatismo. Eso se lo dejo a él. Yo quiero moderación y atender los problemas reales de la gente", recalcó el líder 'popular' en alusión a la entrevista de Iñaki Gabilondo al presidente español.

En un mitin en el Palacio de los Deportes de Santander, ante unos 7.500 seguidores --según los datos de la organización--, el líder 'popular' recalcó que Rodríguez Zapatero "busca a los radicales y los radicales le buscan a él", mientras el PP, en cambio, busca a la "gente normal" para la que propone a partir del mes de marzo un Gobierno "en la tierra" y "en la vida real", que "se aplique" en resolver los problemas de los ciudadanos y se ocupe "de lo cotidiano y del día a día".

Contrapuso ese proyecto 'popular' con un Gobierno "en la luna" encabezado por un presidente que "está en la filosofía" y es "alérgico a la economía", el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y de Pedro Solbes que, según dijo, está "aburrido y cansado" y lleva "cuatro años diciendo que se va a ir".

En eso sí que le dio la razón Rajoy porque, en su opinión, efectivamente Solbes "se va a ir, dentro de unos días". De hecho, el líder 'popular' se mostró convencido de que el objetivo de la victoria 'popular' "está muy cerca" y subrayó que las encuestas "cada vez son mejores" para el PP. "El cambio necesario, hoy es un cambio posible, y dentro de unos días será un cambio real", apostilló.

El candidato del PP aseguró que España "necesita" que las próximas elecciones las gane el Partido Popular, porque "hay que actuar" y no se puede seguir cuatro años más "en el inmovilismo". A su juicio, "lo que necesita España es un Gobierno".

"No es un problema de derechas, ni de izquierdas ni de centro. España necesita un Gobierno con principios claros, que fije objetivos conocidos por todos y medidas concretas para llevarlos a buen puerto. Y eso es lo que no ha tenido estos cuatro años", sentenció Rajoy, quien opinó que "lo peor que le puede pasar a un gobernante es no tener una idea clara de su país y no tener proyecto nacional con el que ilusionar a los ciudadanos".

En cambio, él ofrece, "ideas, ganas, coraje y determinación" y propone "gobernar con tolerancia". "Aspiro a formar un Gobierno serio, realista y moderado. No quiero ir a la Moncloa a divagar ni a crear problemas. Mi obligación es resolverlos", resaltó Rajoy. Al mismo tiempo, rechazó crear "divisiones entre los españoles" y propuso "un gran proyecto nacional" para "derrotar a ETA" y para que España "sea una de las mejores economías del mundo y esté a la altura de las mejores de Europa".

"UNA GRAN POTENCIA ECONÓMICA".

"Vamos a recuperar el tiempo perdido para hacer de España una gran potencia económica", señaló el líder 'popular', que dijo además contar para ello con "el mejor equipo económico". Criticó en cambio al Gobierno de Zapatero, que "ha vivido de la herencia y de la inercia" y que, después de recibir "la mejor herencia económica" de la democracia, se ha limitado a "sentarse a ver lo bien que iban las cosas" que es, en definitiva, "la mejor forma de que las cosas empiecen a no ir bien".

Mariano Rajoy, que alertó de los "efectos negativos" que produce la 'Z' en la ciudadanía española, repasó en Santander algunas de las propuestas del programa electoral del PP para trabajar por ese cambio económico. Se comprometió a no aplicar "esa ridícula y antisocial" medida de los 400 euros y defendió en su lugar la supresión del IRPF para quienes ganen menos de 16.000 euros. Reiteró también su voluntad de rebajar al 20% el impuesto de sociedades para las pymes, de subir las pensiones y de conseguir en dos legislaturas que el número de mujeres que trabajan fuera del hogar iguale al de varones.

Además, apostó por hablar de "mérito, trabajo y esfuerzo" en el sistema educativo, en lugar de hablar de Educación para la Ciudadanía, y por impulsar la formación de los jóvenes, porque en ellos reside el futuro de España. Pero también incidió en la necesidad de hablar de otras cuestiones como la energía o la inmigración. "Hay que poner orden y control en la política de inmigración, al igual que en la seguridad ciudadana", apuntó.

7.500 SEGUIDORES Y 52 AUTOBUSES.

El líder 'popular' logró reunir en Santander, según los datos de los 'populares', a unas 7.500 personas, muchas de las cuales llegaron a la capital cántabra en los 52 autobuses que partieron durante la tarde de distintos puntos de la región. La respuesta de los seguidores del partido desbordó las previsiones de la organización, que había habilitado para el mitin sólo parte del Palacio de los Deportes de Santander y, sobre la marcha, tuvo que ir abriendo nuevos espacios.

Después, el público se volcó con el candidato 'popular', y al tiempo que agitaba las decenas de banderas del PP y algunas banderas españolas, coreó consignas de apoyo a Rajoy. 'Se nota, se siente. Mariano presidente', '¡A por ellos. Oé!' y 'Rajoy, amigo. Cantabria está contigo', proclamaron los seguidores del partido en repetidas ocasiones, unas frases de aliento que el presidente 'popular' acogió en algunos casos poniéndose en pie para mostrar su agradecimiento.

En su intervención dio las gracias a todos esos seguidores, militantes y cargos públicos que le arroparon esta tarde en Santander, pero también a todos los que han apoyado al PP a lo largo de cuatro años que "no han sido fáciles", en los que el partido ha tenido que dar "muchas batallas y defender posiciones que nunca antes nadie había puesto en tela de juicio". "Nos han arreado fuerte, pero hoy estamos aquí y vamos a ganar las elecciones del próximo 9 de marzo", concluyó Rajoy.

El de Santander fue un mitin participativo, en el que el líder 'popular' se vio constantemente interrumpido, no sólo por aplausos, sino también por los comentarios del público, al que fue dando sucesivamente la razón. Él mismo propició esa interactividad con los presentes, al abrir su intervención con una sucesión de preguntas para que los seguidores corearan las respuestas.

"¿Ustedes se fían del señor Rodríguez Zapatero?". Ésa fue la primera frase que dirigió a un auditorio entregado que coreó un 'no', con el que también respondió a otras preguntas sobre la política económica de Zapatero o de seguridad. En cambio, la respuesta unánime fue un 'sí', cuando Rajoy les preguntó si hace falta un cambio de Gobierno.