ALMERÍA, 26 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente del PP-A, Javier Arenas, realizó hoy un balance de la actividad llevada a cabo durante el año 2009, el cual, según sus razonamientos, "ha sido probablemente el peor de los últimos 30 años" en términos económicos y en términos sociales, así como en "estabilidad política".
Durante su intervención en la Junta Directiva Provincial del PP de Almería, Arenas indicó que la Comunidad andaluza "empezó el año con un presidente y termina con la silla vacía", en referencia al nombramiento de Manuel Chaves como vicepresidente tercero y ministro de Cooperación Territorial y la toma de posesión de José Antonio Griñán como presidente de la Junta de Andalucía.
"El que se fue no se acaba de ir y el que venía no acaba de llegar", señaló el presidente de los populares andaluces quien volvió a incidir en la necesidad de un "gran acuerdo político y social para luchar de forma eficaz contra la crisis", ya que, según manifestó, España es el país de la Unión Europea "más perjudicado" por la actual coyuntura económica.
Para el también vicesecretario de Política Autonómica y Local del PP, tanto el Gobierno estatal como el regional "no tienen credibilidad para ofrecer confianza", por lo que, a su juicio, debe sustituirse la actual situación "por un gran acuerdo de todas las fuerzas políticas y también de las fuerzas sociales".
En este sentido, Arenas calificó de "imprescindible" para la recuperación de la economía la puesta en marcha de programas de austeridad, la reforma del mercado de trabajo, debatir el futuro de la energía en España y un análisis sobre la bajada de impuestos que no haga suponer una mayor recaudación por incremento de la actividad económica.
De esta forma, el presidente del PP-A se mostró tajante a la hora de solicitar más liquidez y financiación a las pymes y autónomos para la recuperación económica. "O el dinero circula, y los pequeños y medianos empresarios y autónomos que tienen una actividad viable tienen financiación para mantenerla, o la salida de la crisis será imposible", apostilló.
CONCERTACIÓN
Por otra parte, Arenas criticó las políticas de concertación que se llevan a cabo desde la Administración regional, ya que, para él, "la concertación sin reforma a lo mejor significa alegría, o darle oxígeno al ego del actual presidente de la Junta, pero la sociedad no percibe esa concertación como consecuencia en su familia o en su actividad económica".
En este sentido, consideró que los dirigentes políticos "deben de abstenerse a la hora de influir en las decisiones internas de los sindicatos o los empresarios", un aspecto que ejemplarizó a través del caso del presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), ya que, según dijo, Griñán "no puede decir quien debe presidir la organización de los empresarios, eso es faltarle el respeto a las organizaciones sociales, a su independencia y a la propia madurez de ellas".
