Arístegui cree que McCain ha sido "injustamente tratado" y asegura que es "centrista"

Opina que la política exterior será "similar" con Obama o con McCain, porque no tienen "margen"

Europa Press Nacional
Actualizado: martes, 4 noviembre 2008 12:28

MADRID, 4 Nov. (EUROPA PRESS) -

El portavoz del PP en la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso, Gustavo de Arístegui, afirmó hoy que el candidato republicano a las elecciones estadounidenses que se celebrarán esta madrugada, John McCain, ha ido "injustamente tratado", al tener enfrente a un "formidable oponente".

En declaraciones a Antena 3 recogidas por Europa Press, Arístegui aclaró que no es "nada conservador", sino "uno de los republicanos más centristas de su partido", un "auténtico 'outsider'", que fue "denostado" y criticado públicamente por la Liga Conservadora de Estados Unidos, principal aliado de George Bush.

"El error táctico de McCain fue buscar a una persona que complementase lo que él no era, un conservador clásico", sentenció. Esta persona, la candidata a la vicepresidencia Sarah Palin, es, a su juicio, "excesivamente conservadora" y está "demasiado a la derecha", lo cual "ha asustado" a una parte del electorado centrista, como el grupo que apoyaba a Hillary Clinton y estaba "irritado" con Obama.

Por otro lado, también alabó al candidato demócrata, Obama, por ser "un gran orador", tener "mucho carisma" y suscitar "esperanza". En esta línea, explicó que tuvo la intuición de que se presentaría y ganaría las primarias de su partido cuando oyó un "espectacular" discurso, "muy integrador", que dio en Boston, donde aseguraba que "no hay dos américas", "una liberal y otra conservadora, una roja y otra azul, ni una hispana, otra blanca y otra negra", sino que "hay unos Estados Unidos de América".

El dirigente popular aseguró que los presidentes de Estados Unidos tienen un "margen muy pequeño" para hacer una política exterior propia, por lo que gane Barack Obama o John McCain las elecciones, su política internacional "será bastante similar". También afirmó que el Gobierno español deberá tener una "fluida y estupenda" relación con la Casa Blanca, sea quien sea su próximo inquilino.

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