Montilla acusa a PP y nacionalistas vascos y catalanes de usar las "pasiones identitarias" para obtener "réditos"
VITORIA/TOLEDO, 27 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, incidió hoy en las críticas al Partido Popular, al asegurar que el discurso de "España se rompe" protagonizado por dicho partido "está hueco, sin contenido". Al contrario, aseguró que el impulso de las infraestructuras propiciado por el Gobierno socialista en la comunidad que preside y en el resto de territorios ha contribuido a "conectar mejor España".
Durante su participación en Vitoria en un acto del PSE-EE junto al jefe del Ejecutivo catalán, José Montilla y el presidente del gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias, así como el cabeza de lista del PSE de Alava para el Senado, Javier Rojo, Barreda destacó la contribución del sistema autonómico al desarrollo del conjunto del Estado español.
A pesar de todo, señaló que el reconocimiento de las diferencias existentes entre uno y otro territorio no deben implicar la existencia de "desigualdades a la hora de acceder a oportunidades".
El presidente de Castilla la Mancha también se refirió a las propuestas del Partido Popular en materia de inmigración. Según dijo, las afirmaciones realizadas sobre este tema por el líder de los populares, Mariano Rajoy, le hacen sentir "vergüenza", ya que "están muy cerca de exacerbar sentimientos xenófobos".
Por su parte, el presidente de la Generalitat de Cataluña, José Montilla, denunció que el PP y los nacionalistas vascos y catalanes "tratan de sacar réditos electorales a través de las agitadas pasiones pretendidamente identitarias", una actitud que contrastó con la apuesta de los socialistas por "la formulación de la España plural, que puede ayudar a desacomplejar la mirada que tenemos sobre nosotros mismos".
Montilla subrayó que aunque "España es una vieja nación de Europa, no por ello dejan de conformarla realidades nacionales que se afirman día a día en su identidad y especificidad", algo que puede generar "un polo de tensión evidente".
En esta situación, consideró que "hay quienes, como el PP, desearían que no existieran otras realidades nacionales diferentes a la española y no quieren reconocerlas". También existen los que, como "los nacionalistas vascos o catalanes, piensan que a toda nación debe corresponder un Estado y niegan la posibilidad de la doble o triple identidad de los ciudadanos".
Desde ambas posiciones, según aseguró, se trata de "sacar réditos electorales a través de las agitadas pasiones pretendidamente identitarias".
Frente a esa actitud, contrapuso el compromiso de su partido en favor de "la formulación de la España plural", la cual "puede ayudar a desacomplejar la mirada que tenemos sobre nosotros mismos y ayudar a aceptarnos tal como somos".
"DERIVA RADICAL"
El presidente de la Generalitat subrayó que a pesar de que "la deriva soberanista y radical de la mayoría de los dirigentes nacionalistas ahonda en el tópico de que en Madrid y en España todos son iguales", la realidad es que "en democracia, el avance de la España plural sólo ha sido posible con gobiernos socialistas".
En el caso concreto de Cataluña, denunció que "desde el catalanismo conservador se pretende que PP y PSOE defienden el mismo modelo de Estado". No obstante, subrayó que "los grades elogios de CiU, cuando los ha habido, nunca han ido a parar hacia los socialistas, sino al PP".
Montilla consideró que esta actitud "ha llevado a verbalizar en bastantes ámbitos un discurso de desafección en Cataluña respecto a las posibilidades de la política española".
IGLESIAS.
Marcelino Iglesias, por su parte, destacó que con el nuevo Estatuto de autonomía de Aragón, esta comunidad puede "compararse a sus vecinos". Según explicó, la actitud mantenida por su Gobierno ha sido la de la "lealtad hacia el conjunto" del Estado, aunque precisó que ésta se ha practicado desde la "exigencia".
En este contexto enmarcó su actitud hacia el trasvase del Ebro, asunto ante el que aseguró que "nos hemos cuadrado". "No tiene ningún sentido que prescindamos de recursos fundamentales como el agua para hacer crecer más todavía las comunidades del Levante, que son las que más crecen", explicó, para añadir a continuación que "es más razonable hacer crecer el país en el equilibrio que fomentar más los desequilibrios".
El que fuera presidente del Senado durante esta legislatura, Javier Rojo, denunció la "grave irresponsabilidad" en la que ha incurrido el Partido Popular al articular su política en "el enfrentamiento entre autonomías y entre españoles".
Por ese motivo, y frente a la actitud del PP ante la renovación de determinados estatutos de autonomía, consideró que "es lógico" que cada territorio trate de "adaptar la realidad de su comunidad a la España de hoy".
