Su marido muestra a las cámaras el pecho ensangrentado por tener todavía la bala incrustada que recibió durante el atraco
MADRID, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
Cerca de 200 personas guardaron hoy un minuto de silencio en la tienda del distrito de San Blas donde el pasado domingo asesinaron a una comerciante china de 49 años, Chui Yu Zang, acto al que acudieron la familia de la mujer, la Asociación de Comerciantes Chinos de España, el gerente de la Junta municipal del distrito y la asociación vecinal de la zona.
Alrededor de las 12.00 horas de esta mañana, el presidente de la asociación vecinal de San Blas pidió mayor presencia policial en el distrito, "bien Policía Municipal, bien Policía Nacional", por los "problemas" de seguridad ciudadana que se registran en el distrito. Tras sus palabras, se guardó un minuto de silencio, que acabó con un fuerte aplauso, momento en que el marido de la víctima, visiblemente afectado, rompió a llorar bajo la atenta mirada de los allí reunidos.
El marido mostró a las cámaras el pecho ensangrentado, donde todavía se aloja la bala que recibió durante el atraco del pasado domingo, a la espera de la evolución de la herida y de la decisión de los médicos.
Por otra parte, explicó que los atracadores llevaban puestos pasamontañas, parecían tener menos de 20 años y no ser españoles. Además, el hombre, que lleva en España 17 años, aseguró que después de lo ocurrido en su comercio, que cumplía sólo 13 días abiertos el día del suceso, adoptará medidas de seguridad en la tienda.
Por su parte, el representante de la Asociación de Comerciantes Chinos de España, Felipe Chen, declaró que la comunidad china está muy "conmocionada" por el suceso, "así como la embajada china y las asociaciones de esta nacionalidad en el país".
En este sentido, solicitaron al Gobierno de España y al Ayuntamiento de Madrid mayor presencia policial para la "protección de sus intereses y vida cotidiana". Asimismo, recordaron que éste asesinato es el tercero cometido contra chinos en Madrid y que se suma también a otros tres de carácter grave aunque sin víctimas mortales en la región.
El gerente de la Junta Nunicipal de San Blas, Gerardo Rabasa, que también acudió a la concentración, apuntó que hoy por la tarde propondrá en el pleno una convocatoria urgente de la junta local de seguridad del distrito para pedir información sobre la evolución de la delincuencia y para proponer medidas concretas para atajar la inseguridad, pues este caso "tiene muy preocupados a los vecinos". "No destacamos en actos de delincuencia, pero últimamente ha habido una serie de actos delictivos que están generando una falta de confianza de los vecinos", explicó.
Una vecina y comerciante del barrio, Rosario Cañadas, se lamentó de que este asesinato puede repetirse. "Hoy le pasa a ella y mañana a los demás" y pidió que las administraciones madrileñas que inviertan más en seguridad, "en vez de ofrecer tanto dinero, que luego no dan". Propuso también una ley que endurezca las penas en este tipo de casos y "que el que lo haga lo pague", pues "tampoco se puede tener un policía en cada establecimiento".
