CEUTA 24 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Palacio autónomico de la Ciudad Autónoma de Ceuta acogió esta mañana la Sesión Plenaria Ordinaria más breve de su historia, con apenas 69 segundos de duración. La cita, que no incluía ningún punto en su orden del día más allá del meramente protocolario de dar cuenta a los decretos firmados por el Gobierno que preside Juan Vivas (PP) durante el último mes, concluyó con críticas de los dos grupos de laoposición, UDCE-IU y PSOE, cuyos portavoces acusaron al Ejecutivo de hacer "dejación de sus funciones".
El portavoz de UDCE-IU, Mohamed Ali, consideró "muy grave" la "dejación de funciones a la hora de gestionar los intereses públicos" en que, según su parecer, está incurriendo el Gobierno y justificó laretirada de sus tres mociones de urgencia en una acción coordinada con los socialistas "en señal de protesta ante el Ejecutivo por convocar un Pleno vacío de contenido".
"Nosotros estamos obligados a fiscalizar la acción del Gobierno y a plantear propuestas como las tres que llevábamos y que, sin duda, no caerán en saco roto", dijo Ali, que pedirá un informe a la Secretaría General sobre la legalidad de convocar plenos sin contenido.
La portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Inmaculada Ramírez, insistió en los mismos puntos que Ali y criticó por "anormal" la relación del Ejecutivo con los Grupos de la oposición, a los que, según dijo, veta la información que le solicitan. Además, la portavoz, que ha acusado a los populares de pasarse los Plenos "escribiendo postales navideñas y hablando con sus amiguitos", reclamó "respeto" para su trabajo y para quienes la respaldaron en las urnas el pasado 27 de mayo.
Por su parte, la portavoz del Gobierno, Yolanda Bel, advirtió de que "si la oposición critica al Gobierno por no llevar asuntos al Pleno ellos deberían tener en cuenta los diferentes apartados del orden del día en el que también tienen la oportunidad y la obligación de hacerlo". "El Pleno tiene unas competencias limitadas para la aprobación de presupuestos, planes, ordenanzas, reglamentos y poco más", subrayó Bel, que recordó que en los tres minutos anteriore se había dado cuenta de "más de 600 decretos", una cifra que, a su juicio, "demuestra que el Gobierno no se ha parado".
Se da la circunstancia de que también en la Asamblea de Melilla se vivió hoy el Pleno de Control más corto de su historia, 60 segundos, después del retraso que se produjo en la llegada de los dos grupos de la oposición, PSOE y Coalición por Melilla, lo que motivó que se levantara la sesión en cuanto el secretario general terminó de leer los puntos del orden del día y la vicepresidenta de la Asamblea, Cristina Rivas (PP), constatara que no había diputados opositores que hicieran las preguntas e interpolaciones.
Los diputados socialistas y cepemistas, partidos que han conformado una unión política de cara a las Elecciones Generales del 9 de marzo, se presentaron en el momento que los parlamentarios del PP abandonaban el Salón de Plenos, lo que motivó un cruce de críticas y el anuncio de PSOE y CPM de recurrir a la Justicia para denunciar que no pudieran hacer las preguntas y interpelaciones que habían presentado para este Pleno.
Los hechos ocurrieron esta mañana para un Pleno de Control convocado a las 9.30 horas y que no se inició hasta la 9.36 con la única presencia del grupo mayoritario, los 15 diputados del PP, lo que provocó que una vez leídos los puntos del orden del día y sin presencia de los diez representantes de PSOE (cinco) y CPM (cinco), se diera por concluido la sesión de un solo minuto de duración.
El PP denunció, a través de Cristina Rivas, que el retraso de la oposición "fue premeditado" al sostener que "todo estaba planeado para provocar una polémica" con el Gobierno de la Ciudad. Así, indicó que "el colmo de la desvergüenza fue que esperaran que se diera por levantada la sesión para entrar al Salón de Plenos", según sostuvo por su parte el portavoz del grupo parlamentario popular Daniel Conesa.
En cambio PSOE y CPM anunciaron que emprenderán acciones judiciales por no haber podido participar en el Pleno de Control y recordaron que siempre se da "una espera de cortesía" de diez minutos para los diputados más rezagados. Sus portavoces, Dionisio Muñoz y Mustafa Aberchán respectivamente, consideraron lo sucedido "una provocación" y un "ataque a la democracia" por parte del Ejecutivo de Juan José Imbroda "para no enfrentarse a las preguntas e interpelaciones de la oposición".