MADRID, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Enrique López, criticó hoy a quienes "desde determinados partidos políticos pretenden ayudar a los jueces con recomendaciones", pues éstas "no ayudan a generar el marco de tranquilidad y de sosiego que el trabajo de los jueces requiere".
En declaraciones a Europa Press Televisión, López solicitó "respeto" a la resolución dictada por el juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska, que dejó en libertad a Arnaldo Otegi y otro siete dirigentes de Batasuna tras comparecer por un presunto delito tras la presentación de la Mesa Nacional y de la comisión negociadora.
Así, incidió en el hecho de que debido al "carácter mediático que este tipo de resoluciones tienen, es exigible mayor respeto aún que en otros casos" y apuntó que "los jueces en España saben lo que tienen que hacer", por lo que "no es necesario que se les esté recomendando, desde sectores políticos, qué tienen que hacer día a día".
Por otra parte, López se mostró cauto y no quiso valorar la actuación de la Fiscalía, que en principio citó a los ocho dirigentes de la ilegalizada Batasuna "al entender que éstos habían cometido una serie de delitos a raíz de unas declaraciones", pero que tras la práctica de las diligencias oportunas --las declaraciones de los ocho imputados-- consideró que "los delitos no se dan en la medida que los proponía". "Quién debe explicar este informe es el Ministerio Fiscal", indicó.
Según indicó, el informe del Ministerio Público menciona la aplicación de las normas en base a la realidad social del momento en que son aplicables y "el juez se ha movido dentro del marco legal y dentro de lo que se le aporta" en esta causa.
Sin embargo, quiso hacer alguna puntualización sobre el concepto de "realidad social". Así, López explicó el concepto de realidad social y el alcance jurídico que tiene, y señaló que "el delito de terrorismo está tipificado en el Código Penal, al margen de que haya una voluntad por parte de un grupo terrorista de no volver a delinquir durante un cierto tiempo o de forma definitiva".
"Mientras la banda criminal ETA esté cometiendo un delito que los juristas califican de permanente y hasta que no se disuelva, la existencia de la banda es un delito", concluyó.
