CSI-CSIF acusa al actual Jefe de Policía Local de Coslada de haber sido "el brazo ejecutor de Ginés"

Actualizado: jueves, 6 noviembre 2008 18:09

COSLADA, 6 Nov. (EUROPA PRESS) -

El sindicato CSI-CSIF del Ayuntamiento de Coslada acusó hoy al actual Jefe de Policía Local, el suboficial José Miguel Regidor, de haber sido "el brazo ejecutor de las órdenes de Ginés Jiménez", unas órdenes que según el portavoz de CSI-CSIF, Juan José Álvarez, cumplía y hacía cumplir "aún sabiendo que eran ilegales". Este sindicato asegura que "a día de hoy todavía siguen cometiéndose irregularidades laborales que afectan al funcionamiento interno de la Policía Local".

"Hemos tenido problemas laborales con él, porque era él el que cumplía las órdenes de Ginés aún sabiendo que eran ilegales; él era el brazo ejecutor de Ginés", afirmó Álvarez, al tiempo que admitió que el suboficial "estaba presionado por Ginés" pero "cumplía sus órdenes".

Álvarez puso como ejemplo la situación que vivió el secretario general de CSI-CSIF: "Nuestro secretario general estuvo desterrado en el punto limpio para que estuviera apartado del resto de la plantilla y no afiliara a nadie, porque nuestro sindicato no le gustaba a Ginés Jiménez, y lo puso allí a contar pilas en un punto limpio". "Esa orden la dio Ginés, pero el que la firma es el actual Jefe de la Policía Local", indicó.

El actual Jefe de Policía Local en Coslada tiene rango de suboficial, aunque ejerce de forma transitoria el mando del cuerpo policial debido a la detención de Ginés Jiménez en la Operación Bloque. Álvarez explicó que Regidor "sabe que está de forma transitoria, pero el problema es que se siguen cometiendo irregularidades como por ejemplo el cobro de turnos por parte de agentes que no los están haciendo".

Mañana declararán en los Juzgados de Plaza de Castilla varios de los agentes de CSI-CSIF que acuden en calidad de testigos para explicar al juez Cruz Torres los problemas que tuvieron durante el mando de Ginés Jiménez. Álvarez afirma que desde su sindicato no se explican cómo es posible que el juez les llame a declarar como testigos y sin embargo no hayan sido convocados por la Comisión de Investigación formada en el Ayuntamiento de Coslada para depurar posibles responsabilidades del Caso Bloque.

Según Juan José Álvarez, la situación del sindicato CSI-CSIF y los agentes que están afiliados a él sigue sin haberse normalizado: "Estamos siendo perseguidos, porque aquí, a pesar de existir un gobierno que dicen que es de izquierdas, se está actuando como en una dictadura".

Desde CSI-CSIF se acusa también a otros dos sargentos de Policía Local, a José Antonio Martín García y a Azucena Sotoca Hernández, de conocer "las fechorías que cometía Ginés". Cargan sobre todo contra Sotoca por haber sido la responsable del turno de noche que, según CSI-CSIF, "era cuando Ginés cometía sus mayores fechorías".

"INDIGNACIÓN" DE LOS OTROS SINDICATOS

Estas acusaciones han suscitado la "indignación" de los otros tres sindicatos del Ayuntamiento, UGT, CCOO y CPPM, entre los que suman 6 de los 7 delegados del colegio de funcionarios en el consistorio. Los tres sindicatos han enviado sendos comunicados a todos los trabajadores municipales en los que cargan duramente contra CSI-CSIF.

Desde UGT se califica la actuación de CSI-CSIF como "nauseabunda" y consideran que la acusación de conocer "las fechorías de Ginés" sólo se explica "por el propio conocimiento de las 'actividades nocturnas' que tienen algunos destacados miembros de este sindicato (en referencia a CSI-CSIF) que han pateado la noche durante años acompañando a Ginés tanto de uniforme como de paisano".

"Si tienen conocimiento de algún hecho delictivo deben ponerlo en conocimiento de la justicia, no utilizarlo para intentar estar en ninguna comisión de investigación o hacerle el juego político a alguien", inciden desde CPPM haciendo referencia al malestar hecho público por CSI-CSIF porque varios de los agentes que pertenecen a este sindicato no fueran llamados a declarar en la comisión de investigación formada en el Ayuntamiento por los partidos políticos de la corporación y que tiene como objetivo depurar las posibles responsabilidades políticas que pudieran haberse dado por la presunta trama de corrupción policial destapada por el Caso Bloque.

Desde Comisiones Obreras piden a CSI-CSIF una rectificación pública y se preguntan "si ni investigadores de Policía Nacional, ni jueces, ni fiscales han puesto sombra de duda alguna sobre estos agentes: ¿quién es este sindicato para dudar de la integridad y profesionalidad de las personas que además han tenido la gallardía de responsabilizarse de la Policía Local después del terremoto causado por la operación "Bloque"?".