VALENCIA, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del PSPV, Jorge Alarte, rechazó hoy pronunciarse sobre el voto favorable al estatuto de Castilla-La Mancha, de la diputada socialista valenciana en el Congreso Juana Serna, porque dijo que corresponde a la dirección de Madrid decidir cómo funcionan las comisiones, quién está en cada una. "No tengo nada que decirles" al respecto" porque "no sé como funciona esa dinámica" y "no suelo pronunciarme sobre cosas que no conozco", indicó.
Alarte, que se pronunció de esta manera tras los actos de conmemoración del 25 d'Abril en la Corts, en relación a la votación favorable a estatuto de Castilla La Macha --que incluye una reserva de 4.000 Hm3 para el trasvase Tajo-Segura-- en el Congreso por parte de la diputada valenciana Juana Serna, en la Comisión Constitucional del Congreso.
En cuanto al estatuto indicó que hoy ha leído que alguien ha escrito de él que cada vez que habla de este asunto sonríe" y dijo "sí sonrío". En este sentido, afirmó que la defensa del Tajo-Segura fue uno de sus "primeros compromisos" y sobre este asunto "vamos a mantener una posición firme, sólida y coherente de defensa de un modelo hídrico", aseguró.
Alarte subrayó que los socialistas valencianos "han defendido todos, incluidas nuestras senadoras y senadores, nuestros diputados nacionales y también los autonómicos, esa posición, sin fisuras, sin doblegarnos ante nadie ni ante nada".
Asimismo, recordó que hoy tiene un encuentro con regantes y usuarios de Tajo-Segura para "continuar trabajando con ellos" porque "hemos acreditado nuestra capacidad de mantener una posición firme y clara".
En cuanto a la votación de Serna, Alarte dijo que corresponde a la dirección de Madrid decidir cómo funcionan las comisiones, quién está en cada una y "no tengo nada que decirles" al respecto porque "no sé como funciona esa dinámica" y "no suelo pronunciarme sobre cosas que no conozco".
Finalmente, consideró que en la Comunitat "se tiene que acabar", por parte del presidente Francisco Camps y la alcaldesa Rita Barberá, que "frente a la dialéctica de defender el diálogo", hagan uso de la "dialéctica del pasado". Así, apuntó que el trasvase del Ebro "es pasado" y señaló que "les importa más la propaganda y la confrontación que resolver los problemas de los valencianos".
En este sentido, sostuvo que su disposición es la de "no generar conflicto" pero cuando un Gobierno, ya sea el de Camps o el de Barbera, que "son lo mismo" pero en "versión mala y versión más mala", que "sólo son capaces de crear conflicto" y "no sentarse con nadie", en su opinión "ya están empezando a perder".
