MADRID 15 Ene. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del Grupo Socialista en el Congreso, Diego López Garrido, se refirió hoy al secretario general del PP, Angel Acebes, como "el Príncipe de las mentiras" y le avisó de que, con ese título, no está legitimado para "hablar de las mentiras de otros". En respuesta a las críticas que Acebes dedicó ayer al presidente del Gobierno por haber admitido contactos con ETA después del atentado de Barajas, el dirigente socialista sentenció que "el proceso se acabó en la T-4".
Así se pronunció el portavoz socialista en un desayuno organizado esta mañana en el Congreso por la Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP), durante el que se remitió a las explicaciones sobre esta cuestión que Zapatero ofreció el pasado fin de semana en una entrevista al diario 'El Mundo'.
Al ser preguntado sobre la respuesta del PP a la admisión por parte del jefe del Ejecutivo de que los contactos con ETA se mantuvieron después del atentado del 30 de diciembre de 2006 a petición de algunas instancias internacionales y aún a sabiendas de que había muy pocas posibilidades de reconducir la situación.
"Esta claro que el proceso de paz se acabó en la T-4. Es un asunto del pasado. El horizonte es no recuperar en absoluto ni a corto, ni a medio ni a largo plazo nada parecido a un proceso así", sentenció, destacando, además que las condiciones para el diálogo con ETA que prevé la resolución aprobada por el Congreso en 2005 quedaron "enterradas en la T-4".
Tras esta puntualización, López Garrido señaló que "si hay alguien que no puede hablar de las mentiras de otros, ese es el príncipe de las mentiras". "Acebes es el 'Príncipe de las mentiras', siempre siguiendo las directrices del 'Rey de las mentiras', que es José María Aznar", apostilló.
Así, insistió en que, después de haber "mentido abrupta y desvergonzadamente a los españoles" sobre la guerra de Iraq, las armas de destrucción masiva y el 11-M, los 'populares' "tendrían, por lo menos, que estar muy callados". Además, reiteró que "debería darles vergüenza" de la "utilización partidista" que han hecho sobre la lucha contra ETA en estos cuatro años que, según sus augurios, les "pasará factura" el próximo 9 de marzo.