EUPV compara al Gobierno valenciano con el régimen franquista por el contrato de integración de inmigrantes

EUROPA PRESS 26 May. (EUROPA PRESS) -

La coordinadora de EUPV, y diputada autonómica por Compromís, Glòria Marcos aseguró hoy que el consejero de Inmigración y Ciudadanía del gobierno valenciano, Rafael Blasco, "ha perdido totalmente los papeles", puesto que los métodos que utiliza para "convencer" a los inmigrantes sobre el contrato de integración propuesto por el Gobierno de la comunidad autónoma son "similares a los que se utilizaban en el franquismo", según informaron en un comunicado fuentes del partido.

Marcos consideró "lamentable que una asociación de inmigrantes haya denunciado que la Consejería pagó bocadillos y autobuses a las asociaciones que se trasladaron desde Alicante y Castellón" para asistir a la reunión que Blasco mantuvo el sábado con colectivos de extranjeros.

La coordinadora de EUPV criticó que el consejero "primero provoca el rechazo, después intenta la desmovilización y ahora, para convencerlos de su propuesta del contrato de integración, simula un acuerdo". En su opinión, "los métodos que está utilizando Blasco son similares a los que se utilizaban en el franquismo, pagando bocadillos y autobuses, igual que cuando se citaba en la plaza de Oriente durante la dictadura", lamentó.

Además, la diputada rechazó la actitud de la Consejería, puesto que, "algunos de sus responsables de comunicación mostraron su satisfacción a través de mensajes de móvil, por la falta de afluencia de público a la jornada reivindicativa celebrada en el barrio de Russafa y convocada por varias entidades que mostraron su oposición al contrato de integración para los inmigrantes". Al respecto, matizó que "la poca gente que asistió no fue culpa de la falta de la repercusión, sino consecuencia del mal tiempo".

Para Marcos, el consejero "se equivoca con esta actitud, y lo que debe hacer es retirar de una vez por todas el contrato de integración; dejar de comprar voluntades; y olvidarse de esta propuesta, que ha sido rechazada por todos los colectivos sociales porque cultiva segregación y xenofobia".