SAN SEBASTIAN, 4 Ago. (EUROPA PRESS) -
Familiares y allegados de Gurutz Agirresarobe y Aitziber Ezkerra, detenidos este martes en Hernani por su presunta implicación en el asesinato del que fuera jefe de la Policía Municipal de Andoain Joseba Pagazaurtundua, han denunciado la "desproporcionada" actuación de la Ertzaintza y han reclamado que se respeten los derechos de los detenidos, así como "el fin de la incomunicación para evitar torturas".
Más de medio centenar de personas, entre las que se encontraba la alcaldesa de Hernani, Marian Beitialarrangoitia, han comparecido en el salón del plenos del Ayuntamiento del municipio guipuzcoano para reclamar que los derechos de Agirresarobe y Ezkerra sean respetados, así como su presunción de inocencia.
En la comparecencia, el novio de Ezkerra, Lander González, ha denunciado la "totalmente desproporcionada" actuación de la Ertzaintza y la utilización de explosivos por parte de la Policía vasca para acceder a su vivienda, al tiempo que ha censurado que no les dieran "ningún tipo de explicación" durante la detención.
Asimismo, ha criticado la presencia de los medios de comunicación en el exterior de su domicilio a las tres de la madrugada y se ha preguntado por la "intencionalidad de efecto en la opinión pública" de la misma. González, además, ha mostrado una "enorme preocupación" por el estado de los detenidos, en especial por el de Ezkerra, quien sufre una enfermedad reumática degenerativa crónica.
En ese sentido, la doctora Miren Landa, médico de confianza de la familia, ha explicado que la dolencia que sufre la detenida precisa de un "riguroso" tratamiento médico y se ha mostrado preocupada por que las posturas forzadas en esta enfermedad, que afecta especialmente a las articulaciones, "pueden suponer una tortura".
Finalmente, el abogado Aiert Larrarte ha criticado que el juez Fernando Grande-Marlaska se haya negado a que un médico de confianza visite a los detenidos y ha reclamado la aplicación de los protocolos que recomiendan los diferentes organismos internacionales de defensa de los derechos humanos para evitar la tortura.
En esta línea, ha criticado que, pese a que la Ertzaintza realiza grabaciones del periodo de incomunicación, "estas imágenes no hayan sido nunca vistas por ningún juez, fiscal, o el Ararteko" y ha pedido que "se acabe con la incomunicación para acabar con la tortura".
