La Operación Mate logra además desarticular el entramado financiero de esta estructura que habría ocultado a Hacienda más de 1,3 millones
MADRID, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -
Hace sólo un año el Ministerio del Interior aseguraba haber desarticulado el "tentáculo" con el que ETA controlaba a sus presos tras el arresto de varios abogados, incluida su principal responsable, Arantza Zulueta. Pero el Instituto Armado bautizó aquellas detenciones como 'operación Jaque', por lo que se deducía que las fuerzas de seguridad se reservaban al menos un capítulo más.
Han pasado doce meses desde la 'operación Jaque' hasta la 'operación Mate', desplegada a primera hora de este lunes contra este frente de letrados. Supone el tercer gran golpe policial en menos de cinco años contra una de las estructuras claves del entorno etarra, que acumula ya numerosas detenciones, según los datos recogidos por Europa Press.
Como objetivo de fondo de estas operaciones siempre estuvo la intención de romper el cordón umbilical que unía a los presos con la dirección de la banda en Francia. Las fuerzas de seguridad descubrieron que eran los abogados los encargados de llevar a las cárceles las directrices de ETA y de hacer velar por la ortodoxia, la unidad y la fidelidad a la organización. También frenar posibles disidencias internas. Esa era su principal labor, incluso por encima de la propia representación letrada.
OPERACIÓN H-ALBOKA (2010)
El primer golpe llegó en el mes de abril de 2010. Aún quedaba más de un año para que ETA decretase el cese definitivo de la violencia cuando la Guardia Civil desplegó una operación que se saldó con 11 personas detenidas, entre ellas los abogados Jon Emparantza, Iker Sarriegi y Arantza Zulueta. Fueron acusados de servir de correo entre la banda y las prisiones como parte de una estructura llamada 'Halboka', siglas en euskera de "Hornak Apurtuz Laster Borrokalariak Kalea (Rompiendo las Paredes Pronto los Luchadores a la Calle)".
En el marco de esa misma operación fue detenido en Francia a petición de la Guardia Civil un entonces desconocido David Pla Martín a quien las autoridades galas dejaron en libertad pocos días después. Alegaron que no existían pruebas suficientes para relacionarle con las actividades de las que se le acusaba. Actualmente David Pla está considerado como el 'número uno' de ETA junto a Iratxe Sorzábal.
El segundo gran golpe, la 'operación Jaque', tuvo lugar a principios del año pasado, concretamente el 8 de enero, pocos días después de la foto en Durango de los históricos etarras excarcelados tras la derogación la 'doctrina Parot' y pocos días antes de la tradicional manifestación en el País Vasco a favor de los presos terroristas. Esta vez fueron detenidas ocho personas entre ellas de nuevo Jon Emparantza y Arantza Zulueta, encuadrados en el sector más duro del entorno etarra.
OPERACIÓN JAQUE (2014)
Todos ellos eran miembros permanentes del 'KT' (Koordinadora Taldea) formado por personas vinculadas al Colectivo de Presos de ETA (EPPK en sus siglas en euskera). El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, explicó que "era el tentáculo que desde ETA permitía controlar a sus presos y someterlos a su tiranía".
Los responsables de la lucha contra la banda no ocultaban aquellos días su satisfacción por una nueva detención de la escurridiza Zulueta. Tras su arresto en abril de 2010, quedó en libertad en diciembre de ese año. Posteriormente volvió a ser arrestada en julio de 2011 y salió en libertad provisional de nuevo en septiembre de 2012 tras pagar una fianza de 60.000 euros. Se le considera la verdadera voz de los presos en la sombra y algunos de los internos la acusaron de ser la encargada de redactar los comunicados del colectivo a espaldas de los debates en prisión.
Las fuentes consultadas indican que su arresto sumió al Colectivo de Presos de ETA (EPPK por sus siglas en euskera) en una situación de desconcierto debido a la falta de un liderazgo claro y a la dificultad para articular estrategias o difundir sus mensajes. Su perfil dominante en las prisiones le generó el rechazo de presos e incluso uno de ellos llegó a describirla como "una hiena" en una carta.
OPERACIÓN MATE (2015)
Del despacho de Zulueta la Guardia Civil se llevó un total de 30 cajas con documentación que ha servido ahora para que este lunes la Guardia Civil haya asestado a este colectivo de abogados el que podría ser el golpe definitivo. Además de practicar otras doce detenciones de abogados, la principal novedad es que ha logrado desarticular su entramado financiero. El Ministerio del Interior les acusa de blanqueo de capitales y delitos contra la Hacienda publica, concretamente al ocultar al fisco más de 1,3 millones de euros en 2012 y 2013.
Junto a los abogados han sido detenidos cuatro tesoreros de la plataforma de apoyo a los presos Herrira, suspendida de actividades por formar parte de ETA como continuadora de las ilegalizadas Gestoras Pro Amnistía y Askatasuna. Según la Guardia Civil, seguían ejerciendo como tesoreros y entregaban el dinero a los abogados que, presuntamente no declaraban.
Agentes del Instituto Armado han registrado numerosos locales y despachos, incluyendo la sede del sindicato LAB en Bilbao. Allí la Guardia Civil ha encontrado gran cantidad de dinero en monedas y billetes pequeños. El sindicato ha explicado que es la recaudación de la colecta de la manifestación del pasado sábado en Bilbao en apoyo de los presos de ETA. Lo guardaban en su sede a la espera de poder ingresarlo en un banco, según LAB.
TODOS LOS DETENIDOS
Entre los detenidos en la 'operación Mate' hay veteranos abogados como Ainhoa Baglietto Gabilondo, familiar del concejal de UCD asesinado por ETA en 1980, Ramón Baglietto. También están Alfonso Zenon Castro, abogado de Arantza Zulueta, o Amaia Izko Aramendía, quien además ejerce de portavoz de Sortu y fue la abogada de la etarra Inés del Río, primera excarcelada tras la derogación de la Doctrina Parot.
El resto de detenidos son Arantza Aparicio Lopetegui, Onintza Ostolaza Arruabarrena, Jaione Karrera Ciriza, Atxarte Salvador Navarro, Haizea Zilueaga Larreategui, Eukene Jauregui Lejona, Kepa Mancisidor Chirapozu, Aiert Larrarte Aldasoro y Ane Ituiño Pérez. Además, los cuatro tesoreros de Herrira detenidos son Francisco Javier Balda Araña, Jon Mintegiaga Oiarbide, Javier Carballido Ezkerra y Nagore San Martín Monton.
