ICV debate relanzar el proyecto y su perfil en el Govern con un proceso de renovación en su dirección

Guillot anunció hoy que dejará de ser el secretario general tras la Asamblea

Europa Press Nacional
Actualizado: jueves, 20 noviembre 2008 19:23

BARCELONA, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -

ICV afronta a partir de mañana y hasta el domingo su IX Asamblea Nacional, en la que abrirá un debate para relanzar el proyecto del partido y acentuar su perfil en el Govern, y también abordará un proceso de renovación en la dirección, cuyos miembros serán anunciados por última vez reelegido presidente del partido, Joan Saura.

Unos 900 delegados asistirán a la Asamblea que se celebrará en la Fira de Sabadell (Barcelona), en la que se renovarán los miembros del Consell Nacional y el de la nueva ejecutiva nacional, y donde también se debatirá la ponencia organizativa y de reforma de estatutos así como la de estrategia política.

En cuanto a la renovación que debe llevarse a cabo en el seno de la formación, destaca el papel que jugará el portavoz de ICV en el Congreso, Joan Herrera, que se perfila como sucesor de Saura dentro de cuatro años al frente del partido y, de forma inmediata, como nuevo secretario general, tras la renuncia al cargo que confirmó esta tarde Jordi Guillot.

Guillot, sin embargo, continuará probablemente en la dirección de ICV, en la que las mujeres y los jóvenes ganarán más peso, según informaron a Europa Press fuentes ecosocialistas.

Actualmente, los vicepresidentes de la formación son Joan Herrera, Jaume Bosch, Mercè Rivadulla e Imma Mayol. Sin embargo, tanto Rivadulla como Mayol se prevé que no continúen, y Bosch también anunció que abandonaría el cargo.

PONENCIAS

En la ponencia política, los ecosocialistas hacen autocrítica, destacando que no han sabido explicar suficientemente bien su tarea en el Govern, por lo que pretenden potenciar su perfil y evidenciar las acciones que llevan a cabo en el Ejecutivo catalán.

Precisamente, Saura reflejó estos planteamientos en su informe de gestión que presentó recientemente en un Consell Nacional extraordinario, y que fue aprobado por 108 votos a favor y 2 abstenciones.

Pese a que su contenido expresa que ICV no es "precisamente un socio cómodo" en el Govern, reconoce que el papel que ha jugado en el Ejecutivo catalán ha generado "preocupación y malestar". Según el texto, el partido sufre las "contradicciones de ser un partido de lucha y un partido de gobierno", aunque expone su apuesta por el Govern d'Entesa.

Sin embargo, el documento señala que "si hoy hay un gobierno de izquierdas, es porque ICV creció electoralmente en las últimas elecciones autonómicas", y que los ecosocialistas han defendido políticas relacionados con el medio ambiente, la movilidad y las políticas sociales.

El documento también destaca que sin la presencia del partido en el Govern, la política de vivienda sería "mucho más débil", se hubiera eliminado el Impuesto de Sucesiones, "nadie" hubiera planteado que la futura Ley de Educación de Cataluña (LEC) garantizara la igualdad real de los centros financiados con dinero público, y se hubiera optado por los trasvases de agua.

Precisamente, sobre la gestión de la sequía, Saura reconoció que hubo "errores e insuficiencias en la gestión de la crisis por parte de la Conselleria de Medio Ambiente, especialmente en cuanto a la comunicación", por lo que el documento añade que hay que "extraer lecciones y prestar especial atención a la mediación y al diálogo ante cualquier tipo de conflicto territorial".

CORRIENTES CRÍTICAS

Precisamente, la gestión que ICV hizo de la sequía es unos de los aspectos que reprocha el sector crítico 'Manifest Maig' --liderado por militantes del Maresme, La Selva y el Vallès--, y también, en parte, el manifiesto impulsado por el ex conseller de Medio Ambiente Salvador Milà, que se presenta bajo el nombre de 'Iniciativa, ¡que se note!,

Ambas corrientes concentran sus críticas en la labor que llevó a cabo el conseller de Medio Ambiente, Francesc Baltasar. Sin embargo, Manifest de Maig no ha presentado ninguna enmienda al respecto, mientras que el grupo liderado por Milà sí lo hace y admite "errores en la gestión política y comunicativa del problema y de sus soluciones".

Respecto a la figura de Saura, ninguna corriente crítica propuso un candidato alternativo a Saura en las elecciones primarias que se celebraron el fin de semana pasado, que ganó con un 83,7 por ciento de los votos, pese a que hubo un 10,8 por ciento de votos en blanco y un 5,8 por ciento en contra.

En el manifiesto de Manifest de Maig se destaca que ICV ha tenido una trayectoria "errática" en los últimos años, y se constata que el proyecto del partido ha sufrido "una involución en relación con sus objetivos de ser referente de la izquierda transformadora y de convertirse en fuerza de gobierno y de lucha".

Indican, además, que el segundo tripartito ha contribuido a la "desafección" entre la militancia y la dirección ecosocialista, y ha conllevado un "considerable aumento del aislamiento del partido en relación a su entorno, y especialmente entre los sectores sociales organizados".

Por su parte, desde 'Iniciativa, ¡que se note!', reprochan la forma como ICV negoció su entrada en el actual Govern d'Entesa, destacando que el partido jugo un papel "complementario", y piden también no limitar la política de alianzas al PSC.

Existe un tercer manifiesto titulado 'Por unas políticas soberanistas en ICV', que también ha presentado enmiendas a las ponencias dirigidas a acentuar el acento nacional de la formación, y que apoyan más de un centenar de miembros, entre los cuales se encuentra el eurodiputado Raül Romeva.

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