La jueza decreta el secreto de las diligencias sobre el caso de la supuesta desaparición de una mujer en Córdoba

Actualizado: jueves, 4 septiembre 2008 16:58

LUCENA (CÓRDOBA), 4 Sep. (EUROPA PRESS) -

La titular del Juzgado de Instrucción nº 3 de Lucena (Córdoba) ha decretado del secreto de las diligencias sobre el caso de Mimouna Bachir Mostar, supuestamente desaparecida desde el pasado 9 de agosto en dicha localidad, "lo más probable para una boda que ella no desea", según asegura su novio, Pablo Miranda.

Así lo confirmaron a Europa Press fuentes cercanas al caso, después de que el letrado del joven hiciera esta petición con la idea de agilizar el procedimiento porque consideraba que se encontraba en un punto muerto.

El pasado día 11 de agosto Pablo Miranda presentó una denuncia en la Policía Nacional, por la que el juez inició diligencias y tomó declaración al padre de Mimouna, quien manifestó que "ella estaba en Argelia, en los campamentos saharauis, a los que se había desplazado por su propia voluntad para visitar a un familiar".

La relación entre estos dos jóvenes comenzó hace un año y medio y para poder verse, "ella tenía que engañar a su padre porque no quería que mantuviese relaciones con personas ajenas a su círculo", comentó Pablo.

De hecho, destacó que en una ocasión ella le comentó que tenían que dejar la relación porque no iba a ser aceptado por su familia, procedente de los campamentos saharauis de Tinduf, al tiempo que le dijo a sus amigas que un hombre, también de nacionalidad argelina, había estado en su casa y que se trataba "del novio que su padre había elegido para ella".

Además, según explicó Pablo Miranda y su letrado, alrededor del mes de abril del año pasado, Mimouna salió un día de casa "tras haber recibido una paliza de su padre", por lo que se alojó en un hotel de Lucena durante tres días. Luego, se trasladó a vivir a Córdoba y los fines de semana los pasaba en la casa de su novio en Encinas Reales (Córdoba).

Afirmaron que en la semana de la desaparición, un día que durmió en la casa de sus padres, "le quitaron el pasaporte" y el pasado día 9 de agosto recibió una llamada de su hermando diciéndole que tenía que ir a ver a su madre porque estaba muy enferma. Entonces, se desplazó a Lucena y a partir de ese momento su móvil dejó de estar operativo.

Ante esta situación, el letrado manifestó que "la postura que tome el Frente Polisario va a ser clave, ya que no se pueden cumplir unas garantías de que, si ella declara, no lo haga forzada".

El padre de la joven argelina volvió a declarar una segunda vez ante el juez y mantuvo su postura de que ella se había ido por su propia voluntad. Además, le dio una dirección y número de teléfono donde poder localizarla.