La madre de la joven Desireé Prieto dice que se "ha hecho justicia" con la condena de 44 años a su asesino

Actualizado: martes, 24 junio 2008 19:14

GIJÓN, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -

María Dolores Prieto, la madre de la joven Desireé Prieto asesinada por su ex pareja sentimental en el verano de 2006, aseguró hoy que la la Audiencia ha hecho "justicia" con la condena del asesino de su hija. El hombre J.M.S., que hirió además gravemente al hijo de dos años que tenía con Desireé, ha sido condenado a 44 años de cárcel --25 por el asesinato de la mujer y 19 por el intento de asesinato del niño--.

"No puedo decir que estoy satisfecha porque he perdido a mi hija, pero al menos tengo la conciencia tranquila de que se ha hecho justicia", dijo en declaraciones a Europa Press María Dolores Prieto.

Su deseo, ahora, es que el acusado "cumpla la condena". "Eso es lo único que espero porque ni yo ni mi nieto, que estuvo durante cinco horas entre la vida y la muerte, no vamos a poder olvidar esto".

En cuanto a la indemnización que el juez ha fijado para el pequeño --132.000 euros-- y la familia --80.000 euros--, María Dolores Prieto dijo "no importarle el dinero", salvo para conseguir que el "pequeño pueda llevar una vida mejor".

"Con todo lo que hemos pasado, no puedo pensar en el dinero porque para mí no lo quiero; si al final nos pagan algo todo será para intentar que mi nieto viva un poco mejor", concluyó María Dolores Prieto.

Desireé Prieto, de 22 años, dejó a su hijo de dos años al cuidado de su ex compañero sentimental y padre del niño para recogerlo cuando saliera de trabajar el 14 de julio de 2006. A última hora de la tarde de aquel día cuando vio que el hombre y el niño no estaban en la parada de autobús donde solían quedar se dirigió al domicilio del acusado en el barrio gijonés de Portuarios.

Unas horas más tarde, extrañada por el hecho de que su hija y su nieto no regresaban a casa, la madre de Desirée avisó a la Policía. Cuando los agentes accedieron al interior de la vivienda de J. M. S. D., encontraron en el suelo el cadáver de la joven que había sido degollada. El niño estaba gravemente herido por arma blanca y estaba tendido en la cama junto a su padre que presuntamente intentó suicidarse cortándose las venas.