Nota para los abonados sobre la información: ' Quintana afirma que "la mejor herramienta política"'

El portavoz nacional del BNG, Anxo Quintana, afirmó hoy que "muchos gallegos tienen como objetivo el 9 de marzo pararle los pies al PP" y resaltó que la "mejor herramienta política" para este objetivo "es el BNG" que ya "ha dado sobradas muestras de eso".

Así, en un acto político en O Porriño (Pontevedra), el líder nacionalista gallego resaltó que apoyar al BNG es "la única manera de que Galicia sea decisiva en Madrid" y reiteró que "cuanto más BNG haya en Madrid más posibilidades de bienestar existirán para los gallegos".

Además, Quintana aprovechó para volver a pedirle a PP y PSOE que respondan a la propuesta del BNG sobre la reforma del voto emigrante así como que acudan a los debates convocados en la televisión publica gallega "como hizo y hará siempre el BNG".

Anxo Quintana insistió en que estas dos cuestiones "son vitales" ya que tratan "de la necesidad de claridad y transparencia democrática" para Galicia, algo que, resaltó, "es lo que ejerce siempre el nacionalismo".

DIEZ CONDICIONES.

Por su parte, la cabeza de lista del BNG al Congreso por Pontevedra, Olaia Fernández Dávila, aseguró que en una situación sin mayorías absolutas después del 9 de marzo el BNG "pondrá encima de la mesa de negociación un decálogo con las diez condiciones para una negociación post-electoral" y aseguró que "en esas diez condiciones aparece la palabra Galicia diez veces".

En este sentido, la candidata del BNG aseveró que "los nacionalistas gallegos están en política por convicciones" por lo que su programa está concebido como "un contrato con la ciudadanía".

Así, señaló que la presencia del BNG en Madrid es relevante para el "avance hacia un estado plurinacional y el impulso del autogobierno en Galicia con transferencias como el salvamento marítimo o el tráfico" así como para "garantizar que la comunidad reciba de los presupuestos del Estado el 8% de la inversión total", la vuelta de Navantia-Fene a la construcción naval civil y el incremento de hasta 6.500 megavatios de la capacidad productiva del sector eólico, sin olvidar la renegociación de la cuota láctea.