La ponencia para reformar el 'Estatut' afronta su recta final sin garantías de que ERC se sume

MADRID, 1 Mar. (EUROPA PRESS) -

Los trabajos de la ponencia que estudia en el Congreso la reforma del Estatuto de Cataluña entran en su recta final, y lo hacen sin garantías de que ERC se sume al acuerdo final. Los republicanos consideran la jornada de hoy como el día "más definitivo" y llevarán a la reunión una propuesta para mejorar la financiación y la exigencia al Gobierno de que respete sus compromisos sobre la cesión de los aeropuertos. En el PSOE hay tranquilidad, porque tiene la mayoría del Congreso para aprobar el texto. Desde CiU, su secretario general, Josep Antoni Duran Lleida, advirtió que ERC no puede dar lecciones ni acusar a los convergentes de "haber traicionado a Cataluña".

Llega "el día más definitivo" para la reforma del Estatuto catalán. Así lo definió el portavoz de ERC en el Congreso, Joan Puigcercós. En esa reunión se votarán los ocho puntos en los que todavía no hay acuerdo entre el PSOE y los partidos catalanes. La idea es seguir negociando, pero el margen se acaba, puesto que el informe definitivo tiene que estar redactado el próximo lunes día 6 de marzo.

La cuestión pendiente más polémica es el artículo sobre la gestión de puertos y aeropuertos. ERC e ICV exigieron al PSOE que cumplan el acuerdo cerrado en las negociaciones previas a las reuniones de la ponencia. Puigcercós aseguró que lo único que pide es la aplicación del artículo 150.2 de la Constitución, "nada del otro mundo" y algo a lo que el PSOE ya había dado luz verde. El PP, según explicó su presidente en Cataluña, Josep Piqué, está dispuesto a debatir sobre la gestión del aeropuerto barcelonés de El Prat, pero no dentro del Estatuto.

Al margen de los artículos sobre competencias, la reunión de hoy debatirá el título que regula las relaciones entre la Generalitat, el Estado y la Unión Europea y el relativo a la financiación. Sobre éste hay ya un acuerdo entre el PSOE y CiU, pero ERC quiere retocarlo y llevará tres propuestas de mejora (la gestión de otros impuestos además del 50 por ciento del IRPF, que se establezca una garantía pública de inversión del Estado en Cataluña en términos de la aportación catalana al PIB nacional y que la financiación se pueda homologar en 15 años con el concierto.

APOYO SUFICIENTE

En el PSOE reina cierta tranquilidad. Diego López Garrido, secretario general del Grupo Socialista en el Congreso, confió en que ERC se sume al acuerdo, pero recordó que el actual proyecto cuenta ya con el respaldo de un porcentaje muy amplio de la Cámara. El portavoz adjunto del PSC en el Parlamento catalán, Joan Ferran, emplazó directamente a Esquerra a dar "un paso hacia el pragmatismo" y sumarse al pacto.

ERC ha escuchado críticas desde CiU. Josep Antoni Duran Lleida, secretario general de la Federación convergente, llegó a preguntarse "quién es Esquerra para darme lecciones a mí de que hemos traicionado al pueblo de Cataluña respecto del Estatut, cuando lleva dos años dando apoyo al PSOE a cambio de absolutamente nada". Duran cree conveniente que la formación republicana se sume al acuerdo final, pero advirtió que "el debate político no puede continuar pendiente de una decisión de ETA".

"No pienso dedicar más tiempo de mi trabajo político a requerir a ERC a que esté en el acuerdo del Estatut, porque es ERC la que no ha sabido o no ha querido administrar el hecho de que el PSOE tenía la necesidad de llegar a un acuerdo con CiU", dijo. Lo que los convergentes tienen claro es que ERC debería abandonar el Gobierno catalán si persiste en su actitud. Lo dijo Duran Lleida y también Artur Mas, aunque el presidente de CiU centró sus críticas en el PSC y en la "enésima desautorización" de este partido al presidente de la Generalitat, Artur Mas. "Este no es el tipo de gobierno y la figura del presidente de la Generalitat que Cataluña necesita", sentenció.