MADRID, 25 Abr. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de Exteriores del PP, Gustavo de Arístegui, acusó hoy al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de utilizar las Embajadas de España como "premios de consolación" para los ministros que no ha repetido en su cargo, "arrinconando" así a los diplomáticos profesionales. Según avanzó, el PP solicitará explicaciones sobre esta cuestión al ministro del ramo, Miguel Angel Moratinos, cuando exponga en la Cámara Baja los planes para su departamento.
En declaraciones a Europa Press, el diputado 'popular' confesó que su partido está siguiendo "con preocupación" las informaciones que apuntan a un "aumento exponencial de nombramientos políticos" al frente de las sedes diplomáticas. "Da la impresión de que, más que la idoneidad profesional o incluso política, lo que se está haciendo es utilizar las embajadas como premios de consolación para tranquilizar los ánimos de ministros cesados", recalcó De Arístegui.
El diputado del PP citó, en concreto, los casos de la ex ministra de Educación María Jesús Sansegundo, quien tras su salida del Gobierno fue nombrada representante de España ante la UNESCO; el de la ex titular de Medio Ambiente Cristina Narbona, próxima embajadora ante la OCDE; y el del ex responsable de Industria Joan Clos, quien suena como nuevo embajador en Rabat.
De Arístegui dijo que el PP no cuestiona "la potestad que tiene el Ejecutivo de nombrar embajadores políticos" y reconoció que, de hecho, lo han hecho todos los gobiernos, pero denunció que, además de los tres citados, Zapatero haya colocado también a personas de alto perfil político en embajadas relativamente "medianas" como Bolivia o Paraguay.
PRIMAR A COMISARIOS POLÍTICOS.
También se quejó de que el presidente del Gobierno haya premiado al socialista gallego Miguel Cortizo como embajador en Misión Especial para la Coordinación de las Relaciones con las Comunidades Españolas en Iberoamérica por su "eficaz labor como comisario político recabando votos con fondos públicos para el PSOE en Iberoamérica".
Tras recordar que "un momento dado" también se pensó en un eurodiputado socialista para ocupar la Embajada de España en Bolivia, De Arístegui concluyó que el Gobierno "está arrinconando poco a poco a los profesionales de la diplomacia". Por todo ello, anunció que cuando Moratinos acuda al Congreso para explicar las prioridades de su departamento, el PP le pedirá cuentas sobre "el motivo y la idoneidad de estos nombramientos".
"Espero que preparen bien la respuesta, no se trata de corporativismo, sino de saber si la motivación es estrictamente de conveniencia partidista para tratar de dar salida o consuelo a quienes el presidente ha cesado en sus diferentes remodelaciones ministeriales", apostilló.
