ELCHE (ALICANTE), 19 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente del PP, Mariano Rajoy, afirmó hoy que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "ya no puede echarle la culpa a los anteriores" ni "ser la oposición de la oposición" porque "la herencia de Zapatero es la suya".
Durante un acto celebrado en Elche (Alicante), Rajoy comenzó su intervención aludiendo a "una nueva legislatura y un nuevo escenario político" con un gobierno que, según dijo, no le "gusta" porque "no ha cambiado en lo nuclear", presenta medidas económicas "timoratas" y "sólo cesa a tres ministros, mantiene a Bermejo y a Magdalena Álvarez, que en ningún país normal seguirían al frente de sus responsabilidades".
Además, Rajoy advirtió de que en este nuevo escenario "ya no vale ahora echarle la culpa a los anteriores, ni hacer política sobre el pasado, ni hacer oposición a la oposición", sino que tiene que gobernar.
En esta línea, el líder del PP dijo que "la herencia económica es la suya, la herencia en inmigración es la suya, la herencia en materia de agua es la suya y la herencia en política energética es la suya".
Por ello, según añadió, "ahora, si --Zapatero-- sabe lo que tiene que hacer es gobernar" y aseguró que "cuando no lo haga bien" se lo dirá porque ésa es "la obligación" del PP y para eso les han votado.
De hecho, en su opinión, "ya empiezan mal" porque en el Consejo de Ministros han empezado a poner soluciones a los problemas económicos porque las medidas anunciadas "son insuficientes, timoratas, no generan confianza y no son las que necesita la economía española".
Rajoy, quien destacó que a "lo largo de toda la campaña electoral han dicho lo contrario de lo que estaba pasando", aseveró que "ahora están reconociendo que nos han engañado" porque, además, "los problemas de la economía española hoy se derivan de cuatro años de no hacer nada".
A su juicio, España "tiene problemas de competitividad muy serios, un problema de endeudamiento de las familias y de las empresas, y la crisis de liquidez, que esa sí que es internacional, afecta más que nada a España" por lo anterior.
Esto "no son palabras que no signifiquen nada" sino que representa que "la gente ve cómo suben los precios, cómo los salarios no llegan, cómo se vuelve a oír hablar de desempleo, cómo hay dificultades para ceder el crédito y cómo se restringe el consumo".
La solución, a su modo de ver, pasa por "reformas estructurales, controlar el gasto público, bajar el impuesto de sociedad", además de "aumentar las deducciones por vivienda que el PSOE rebajó en esta última legislatura".
